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María Corina Machado augura que “la libertad de Venezuela está cerca”: “Ha sido una travesía larga y dolorosa”

La opositora venezolana, galardonada recientemente con el Premio Nobel de la Paz, asegura que el régimen de Maduro “está más débil que nunca”

María Corina Machado, líder de las fuerzas democráticas de Venezuela y premio Nobel de la Paz 2025, durante su participación telemática. Sobre el escenario, el expresidente colombiano y también premio Nobel de la Paz en 2016, Juan Manuel Santos. Foto: Kike Rincon | Vídeo: epv
Jessica Mouzo

La opositora venezolana María Corina Machado, recientemente galardonada con el Premio Nobel de la Paz, ha augurado que “la libertad de Venezuela está cerca”. En una intervención grabada y emitida este lunes en el foro World In Progress (WIP) Barcelona 2025, organizado por el Grupo PRISA, la exdiputada de la Asamblea Nacional de Venezuela, que permanece en la clandestinidad desde hace más de un año debido a la represión del régimen de Nicolás Maduro, ha asegurado que su país está “en un momento decisivo”: “Después de 26 años de oscuridad, finalmente la libertad de Venezuela está cerca. Ha sido una travesía muy larga y dolorosa”, ha apuntado. La política venezolana ha asegurado que el régimen de Maduro está “más débil que nunca”: “Venezuela ha demostrado su capacidad de resiliencia. Estamos listos para avanzar a una etapa final de transición a la democracia en paz”.

Machado es una de las veteranas en las filas de la oposición venezolana. Ya había protagonizado durísimos enfrentamientos con el expresidente Hugo Chávez y, tras un tiempo alejada de la primera línea, hoy vuelve a ser, junto a Edmundo González Urrutia, la principal rival de Maduro y del chavismo. El comité noruego del Nobel, que le otorgó el galardón hace apenas 10 días, destacó de Machado “su incansable trabajo promoviendo los derechos democráticos para el pueblo de Venezuela” y “su lucha por lograr una transición justa y pacífica de la dictadura a la democracia”. La líder opositora lleva desde finales de agosto del año pasado escondida en un lugar secreto por la represión del chavismo, una persecución que se recrudeció tras las elecciones presidenciales de julio de 2024, en las que la Machado, que no pudo participar en los comicios por estar inhabilitada, apoyó activamente la candidatura del diplomático Edmundo González Urrutia.

Durante su intervención, emitida este lunes en la última sesión de la primera jornada del World In Progress (WIP) Barcelona 2025, Machado ha denunciado los estrechos vínculos del chavismo con el crimen y ha asegurado que el expresidente Hugo Chávez “fue estableciendo alianzas con estos actores para construir en Venezuela un santuario del crimen que fuera expandiéndose usando los recursos venezolanos y sometiendo a la población”.

Según Machado, a pesar del rechazo ciudadano expresado en estas dos décadas —hubo cientos de marchas de protesta, 30 procesos electorales y 17 episodios de diálogo, ha apuntado— el régimen “consiguió imponerse apelando a la fuerza y al engaño”. En concreto, ha apuntado, el chavismo empleó sistemáticamente tres prácticas: “La división y la fractura de la sociedad, confrontando unos sectores contra otros; a través de la mentira, imponiendo narrativas falsas, tomando el control del aparato de comunicación e invirtiendo miles de millones de dólares comprando alianzas que corroboraran estas narrativas. Y la tercera práctica fue el miedo, el terror, sometiendo a la sociedad a la sensación de vigilancia y persecución permanente”.

Las tornas viraron, sin embargo, en 2023, cuando la oposición venezolana empezó a unir a una población “dividida, triste, sin esperanza”, ha dicho Machado, y logró llevar ese descontento a las urnas en el verano de 2024: “Logramos hacer lo que era imposible: derrotar al régimen con sus propias reglas. Fue la victoria de la soberanía popular”, ha reivindicado, a propósito de los controvertidos comicios en los que Maduro se declaró ganador, aunque gran parte de la comunidad internacional siempre ha cuestionado la validez de esos resultados.

“Cada día el régimen está demostrando más desesperación, fractura, traiciones y divisiones”, ha aseverado Machado. “Sabe que no solo hay un 90% de la sociedad unida decidida a vivir en libertad, sino que más del 80% de las fuerzas armadas y de las policías también quieren vivir con respeto, justicia y ley. El mundo ha entendido que no es una dictadura más, sino una estructura criminal a la que hay que enfrentar aplicando la ley”, ha incidido.

La opositora venezolana ha admitido, eso sí, que “son horas tremendamente peligrosas y delicadas”, pero ha defendido que los venezolanos están “listos para reconstruir un país que está en ruinas”. “Venezuela será libre y su libertad traerá ondas de democracia para nuestra región y quiero pensar que para el mundo”, ha afirmado.

“Para que exista paz, tiene que haber libertad. Y la libertad requiere fuerza moral, espiritual y física. Y la tenemos”, ha concluido.

Tras la intervención de Machado, otro Nobel de la Paz, el expresidente colombiano Juan Manuel Santos, ha comentado sus palabras y, además de celebrar el galardón a Machado, ha enfatizado que la opositora venezolana siempre “ha sido partidaria de una solución pacífica” para la crisis venezolana. “Ojalá haya un cambio de régimen sin violencia”, ha insistido Santos, que recibió el Nobel de la Paz en 2016 por sus esfuerzos en el proceso de paz con las FARC en Colombia.

El expresidente colombiano ha hecho hincapié en la importancia de cultivar “la reconciliación” para cerrar heridas y estabilizar la democracia en Venezuela. “Un país necesita reconciliarse para poder trabajar juntos hacia un mismo objetivo. Esa reconciliación es absolutamente necesaria y yo he visto en María Corina ese talante, esa actitud: si es necesario, sentarse a negociar y hacer sacrificios para una transición pacífica. Esa reconciliación requiere generosidad, visión a largo plazo, hacer la paz. Hay que persuadir a la gente para que cambie de actitud”, ha dicho.

Santos ha recordado que la polarización y el radicalismo “hacen inoperantes las democracias” y ha alertado de los riesgos que enfrentan las democracias actuales: “Las democracias están a la defensiva. Hoy hay más países con autocracias que con democracias. Los extremos están avanzando. Por eso es importante recuperar el mensaje de los valores democráticos”, ha reclamado.

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Sobre la firma

Jessica Mouzo
Jessica Mouzo es redactora de sanidad en EL PAÍS. Es licenciada en Periodismo por la Universidade de Santiago de Compostela y Máster de Periodismo BCN-NY de la Universitat de Barcelona.
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