_
_
_
_
Análisis
Exposición didáctica de ideas, conjeturas o hipótesis, a partir de unos hechos de actualidad comprobados —no necesariamente del día— que se reflejan en el propio texto. Excluye los juicios de valor y se aproxima más al género de opinión, pero se diferencia de él en que no juzga ni pronostica, sino que sólo formula hipótesis, ofrece explicaciones argumentadas y pone en relación datos dispersos

Putin se adelanta en el juego del átomo

Rusia se afianza como potencia mundial, pero su éxito entorpece aún más el inicio de negociaciones para controlar los arsenales atómicos

Carlos Yárnoz
Trump y Putin, antes de comenzar la reunión que mantuvieron en julio en helsinki.
Trump y Putin, antes de comenzar la reunión que mantuvieron en julio en helsinki.PABLO MARTINEZ MONSIVAIS ( AP)

La seguridad occidental frente a las armas nucleares acaba de saltar por los aires. Moscú ha ganado a Washington la carrera para tener un misil hipersónico que deja obsoletos los escudos antimisiles. Se afianza así Rusia como potencia mundial, pero su éxito entorpece aún más el inicio de negociaciones para controlar los arsenales atómicos. Aunque el tiempo apremia, los dos protagonistas, Donald Trump y Vladímir Putin, se exhiben como machos alfa y no como responsables de la seguridad del planeta.

Bajo la supervisión de Putin, el miércoles voló con éxito por vez primera un misil hipersónico, el Avangard. A velocidades entre 5 y 20 veces la del sonido, el artefacto recorrió en minutos los 6.000 kilómetros entre los Urales y la península de Kamchatka. A diferencia de los misiles intercontinentales clásicos —con trayectorias balísticas previsibles y calculables—, los hipersónicos varían su trayectoria constantemente hasta el final. Con el Avangard, se cumple el vaticinio de 2002 cuando Washington abandonó el Tratado de Misiles Antibalísticos (AMB) para desarrollar sin cortapisas su escudo: tarde o temprano, Rusia —y pronto China— desarrollaría sistemas para sortear la barrera.

Más información
Lavrov: “Los tratados de desarme son rehenes de las turbulencias políticas internas en EE UU”
Trump dispara el gasto militar y apuesta por el muro a costa de los programas sociales

Es decir, que la iniciativa alentaría más carreras de armamento. Llega ahora otra oleada con los misiles hipersónicos. No tardará EE UU, que ahora reconoce su incapacidad para defenderse del Avangard, en construir ingenios similares. Solo este año ha invertido 23.000 millones en mejorar su capacidad nuclear. Pero las reglas han cambiado con esos imparables misiles, que auguran ataques globales inmediatos, en minutos, a cualquier punto del mapa con cabezas convencionales o nucleares.

Pese a semejante amenaza para el planeta, Putin y Trump desaprovechan ocasiones de oro —como la de Helsinki en julio— para prorrogar el Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (New START) que expira en febrero de 2021 y que limita a 1.550 la posesión de ojivas nucleares. Por el contrario, Trump dice que abandonará el de Misiles de Alcance Medio (INF) de 1987 —prohíbe misiles en tierra que lleguen a entre 500 y 5.000 kilómetros— porque Rusia, argumenta, lo incumple. Ambos acuerdos han sido claves para el equilibrio nuclear entre EE UU y Rusia, que poseen el 92% de las 15.000 cabezas nucleares en el mundo. Contra toda lógica, los dos actúan como gallos de pelea con espolones de uranio. Para Putin, sus armas “invencibles” marcan “el mayor hito en la historia de las fuerzas armadas”. “Escúchennos ahora”, bramó en marzo al explicar su nuevo arsenal. “Si quieres una carrera de armamento, perderás”, le respondió Trump. “No pueden jugar conmigo a ese juego. Tenemos más dinero que nadie”. La paz mundial pende de quienes así se expresan. Mejor confiar en la suerte.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Carlos Yárnoz
Llegó a EL PAÍS en 1983 y ha sido jefe de Política, subdirector, corresponsal en Bruselas y París y Defensor del lector entre 2019 y 2023. El periodismo y Europa son sus prioridades. Como es periodista, siempre ha defendido a los lectores.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_