Santos exhibe ante la ONU el acuerdo de justicia con las FARC

Para Colombia, la Asamblea de la ONU de este 70 aniversario será para siempre aquella en la que su Gobierno se presentó con un acuerdo crucial con la guerrilla bajo el brazo. El presidente, Juan Manuel Santos, firmó el pacto de justicia con las FARC el miércoles pasado, justo el día antes de comenzar su visita a Nueva York, en la que no ha parado de recibir parabienes de los líderes. Este martes, ante la asamblea, Santos exhibió este paso histórico en un momento de conflictos abiertos y enquistados en todo el mundo.

“Hoy vengo a ratificar ante el mundo que –entre los más de 20 conflictos armados que subsisten en el planeta, y que generan tanto dolor, pobreza y sufrimiento– hay uno, el de mi país, el de Colombia, que está en el camino final de una solución real”, dijo casi ufano. “Vamos a terminar el más antiguo y el último conflicto armado del Hemisferio Occidental”, insistió.

Han sido tres años de negociaciones para intentar acabar con una lacra de más de 50 años en Colombia que critalizó en un acuerdo la semana pasada en La Habana sobre lo que, para Santos, era probablemente “el mayor obstáculo” para firmar la paz, la creación de un sistema de justicia transicional “que garantiza la no impunidad para los delitos más graves cometidos con ocasión del conflicto”, quiso remarcar el presidente en la ONU.

Santos expresó su confianza en regresar a la Asamblea de la ONU del próximo año, con un pacto final cerrado, ya que la fecha límite prevista para ello es el 23 de marzo de 2016. “Una Colombia en paz será un factor positivo para el mundo en asuntos tan diversos–aunque relacionados– como la lucha contra el cambio climático y contra las drogas ilegales, la seguridad o la erradicación de la pobreza extrema”, recalcó.

En cuanto a otro de los grandes lastres del país, las drogas y el narcotráfico, el presidente colombiano defendió una nueva estrategia.

Su Gobierno participará en la Sesión Especial de las Naciones Unidas sobre este asunto dentro de siete meses y, en ese seno, Santos avanzó que seguirá abogando por “una nueva estrategia global que se base en evidencia científica; que haga mucho mayor énfasis en salud, en educación y en combatir las raíces sociales de este fenómeno, y que busque minimizar el daño que hacen las drogas mediante estrategias más inteligentes y más humanas”.