Parte de los activistas españoles de la flotilla regresarán mañana a España

Parte del grupo de activistas españoles que se encuentran en Grecia para participar en la flotilla hacia Gaza ha anunciado que regresa a su país, mientras que otros continuarán con la ocupación de la embajada de España en Grecia, informa EFE. "Nos quedaremos unos cuatro dentro de la embajada hasta que se resuelvan las negociaciones con el Gobierno español", ha explicado Santiago Alba Rico, que entró ayer junto con otros tres compañeros en la legación. Una veintena de personas según los propios activistas -14 según fuentes diplomáticas- han pasado su primera noche en la Embajada española en Atenas para exigir que el Gobierno español intervenga ante las autoridades griegas para que se deje zarpar la II Flotilla de la Libertad. Por su parte, Israel ha prohibido la entrada de grupos propalestinos al aeropuerto de Tel Aviv.

Mañana regresará una parte del contingente del movimiento Rumbo a Gaza, integrado por 45 españoles del barco Gernika, inmovilizado por las autoridades griegas en la isla de Creta desde el pasado viernes para impedir que zarpe hacia territorio palestino. El convoy se compone de una decena de barcos que transportan unas 500 personas hacia la franja de Gaza para romper el aislamiento de la zona y transportar ayuda humanitaria. Los activistas no abandonarán el edificio hasta que se permita la salida de las embarcaciones, ha asegurado su portavoz Alejandro Fernández. Otros seis activistas permanecerán custodiando el barco en el puerto cretense de Kolimway.

El Ministerio español de Asuntos Exteriores rechazó ayer las peticiones de Rumbo a Gaza y en un comunicado les aconsejó que acepten la oferta que les ha hecho Grecia para que sea este país el que se encargue, en colaboración con la ONU, de trasladar por vía terrestre la ayuda humanitaria a la franja de Gaza.

La respuesta de Exteriores no ha satisfecho a los activistas españoles, por lo que decidieron pasar la noche en la legación. Rumbo a Gaza y fuentes diplomáticas coinciden en que la embajada funciona con normalidad. Los activistas ocupan el vestíbulo y tienen acceso a uno de los baños del edificio.

El barco Gernika, en el que viajan los españoles, sigue bloqueado en el puerto de Kolimpari, en Creta, desde el pasado viernes. Inicialmente estaba ocupado por 40 pasajeros, pero ahora un total de nueve personas hacen guardia mientras que sus compañeros ocupan la embajada en Atenas. Salva Lacruz, uno de los miembros de la Flotilla que permanecen en el navío de 24 metros de eslora, ha explicado que el Gernika se encuentra "bloqueado físicamente" por una fragata griega que está "popa con popa y proa con proa" con el barco español.

Los activistas desafían el embargo

Solo uno de los 10 barcos que componen la Flotilla de la Libertad ha logrado esquivar a las autoridades griegas y se encuentra ahora en aguas internacionales. Se trata del navío francés Dignité-Al Karama. Sus nueve pasajeros, todos de nacionalidad francesa, han asegurado en conversación telefónica mantener el ánimo. Annique Couce, una de las activistas a bordo de la embarcación, ha explicado que los pasajeros "conocen muy bien el peligro al que se enfrentan" y que continúan el viaje para "transmitir un mensaje de apoyo internacional".

Tanto el Dignité-Al Karama como el Gernika forman parte de la Segunda Flotilla de la Libertad, que transporta unas 5.000 toneladas de ayuda humanitaria e intenta romper el embargo impuesto a la franja de Gaza por Israel desde 2007 como consecuencia del enfrentamiento que mantiene con el movimiento islamista palestino Hamás. Antes de emitirse la orden griega de bloqueo, una decena de embarcaciones procedientes de 40 países tenía previsto encontrarse en aguas internacionales para seguir juntos hacia Gaza.

Hace un año, la flota con ayuda humanitaria fue asaltada por comandos especiales israelíes, lo que causó la muerte de nueve activistas, ocho de ellos turcos y uno turcoamericano. Israel ya ha expresado su intención de no permitir que los navíos alcancen su destino.

En una campaña aparentemente desligada de la Flotilla, Tel Aviv prohíbe esta semana la entrada al país por avión a los activistas, "hooligans" según el ministro israelí de Seguridad Pública, Yitzhak Aharonovitch. Se trata de una respuesta a un llamamiento hecho en páginas web de apoyo a Palestina para una convocatoria masiva de protesta para reivindicar los derechos del pueblo palestino. Los activistas calculan que unas 600 personas acudirán el próximo viernes a Israel, por lo que el Gobierno ha reforzado los controles de seguridad en el aeropuerto Ben Gurion de Tel Aviv y ya ha expulsado a cinco activistas en los últimos dos días, según el diario Haaretz.