#mecomprounaobra: comprar arte (a buen precio) esta Navidad es posible

Si no sabe qué regalar a sus seres queridos estas Navidades y hay cierta holgura presupuestaria, el arte puede ser la respuesta. ARCO volverá a celebrarse en sus fechas habituales el próximo febrero, si la pandemia no lo impide. Pero, a modo de aperitivo, y coincidiendo con las fechas navideñas, la feria de arte contemporáneo ha lanzado una nueva edición de su iniciativa #mecomprounaobra, que permite adquirir obras de sus galerías participantes a precios más que moderados. Se trata de más de 1.400 obras de entre las que hemos elegido quince en tres rangos de precios. La regla común: nunca superar los 3.000 euros. La selección está accesible desde la plataforma digital E-XHIBITIONS hasta el 14 de enero. El regalo perfecto puede estar aquí, ya sea para dárselo a otra persona o para quedárselo uno.

Menos de 1.000 euros

Gabriel Orozco x The Skateroom : Black Skate Kite (2019). De Gabriel Orozco. Galería Chantal Crousel.

Precio: 292 euros.

Por qué comprarlo: El mexicano Gabriel Orozco es uno de los artistas más influyentes del panorama internacional, y su obra solo suele quedar al alcance de grandes coleccionistas. Pero en esta colaboración con el proyecto The Skateroom firma una edición de 50 ejemplares sobre una tabla de skate, a un precio infinitamente más asequible que su producción habitual.

Benditera LXIII (2021) de Marina González Guerreiro. Galería Rosa Santos.

Precio: 400 euros.

Por qué comprarlo: Su autora es una de las artistas jóvenes españolas más prometedoras. Estuvo presente en las últimas ediciones de las ferias ARCO y Estampa. Una autora veterana del prestigio de Elena del Rivero ha elegido varias piezas de su serie de benditeras para participar junto a ella en la excelente colectiva que puede verse ahora mismo en la galería madrileña Travesía Cuatro.

The Dreams of Erauso (2021) de Mercedes Azpilicueta. Galería Nogueras Blanchard.

Precio: 650 euros.

Por qué comprarlo: Artista argentina residente entre Ámsterdam y Buenos Aires, Azpilicueta ha expuesto en el MAMBA bonaerense o el madrileño CentroCentro. Su obra textil utiliza antiguas técnicas para nuevos discursos, como ocurre en este trabajo inspirado en Catalina de Erauso, la monja alférez, todo un ejercicio de crítica histórica en un pequeño tapiz.

Contrasombra I (2015) de Ángela Cuadra. Galería NF

Recio: 690 euros.

Por qué comprarlo: Es una pieza delicada y bellísima, como pudo comprobarse en la exposición que dedicó esta galería a Ángela Cuadra y Laura F. Gibellini este año. Una pequeña escultura geométrica destinada a habitar en una esquina que, desde su aparente modestia, nos fuerza a reinterpretar todo el espacio en el que se inserta.

Umbral del sol II (2021), de Inma Herrera y Shirin Salehi. Galería F2.

Precio: 850 euros

Por qué comprarlo: La española Inma Herrera y la iraní Shirin Salehi colaboran en esta edición de tres ejemplares. En 2019 obtuvieron el Premio Bienal Pilar Juncosa y Sotheby ‘s de Creación Artística para realizar su primer proyecto conjunto, que se expuso este verano en la Fundación Miró Mallorca con excelente acogida crítica.

De 1.000 a 2.000 euros

Paisaje de noche (M.M.20.43) (2020), de Miguel Marina. Galería Nordés.

Precio: 1.300 euros.

Por qué comprarlo: Ya sea en dibujo, pintura o escultura, el artista madrileño Miguel Marina consigue resultados evocadores y llenos de poesía sin caer en lo remilgado o lo ya visto. Muchas de sus mejores obras son grandes formatos, pero esta otra, más pequeña, es tan buena como cualquiera de ellas.

La suerte es una forma de atención (2021), de Lúa Coderch. Galería Àngels Barcelona.

Precio: 1.452 euros.

Por qué comprarlo: Si no fuera suficiente con saber que Lúa Coderch es una de las creadoras más respetadas de la escena artística barcelonesa (está presente, entre otras, en la colección del MACBA), esta pieza nos seduce por su humor inteligente y poético en la línea de un Joan Brossa. Da un giro al conocido gato chino de la suerte, objeto kitsch contemporáneo por excelencia cuyo mecanismo expone de forma literal.

Sin título (2021), de Elvira Amor. Galería Moisés Pérez de Albéniz.

Precio: 1.800 euros.

Por qué comprarlo: Los colores vivos y las formas abstractas y redondeadas de Elvira Amor convierten sus cuadros en obras con las que convivir resulta una experiencia siempre placentera. Pero, lejos de ser solo una simple artista comercial, es una magnífica pintora.

El impulso del archivo III (2017), de Julia Llerena. Galería Sabrina Amrani.

Precio: 1.800 euros

Por qué comprarlo: Un conjunto de pequeños objetos inútiles, o fragmentos de ellos, que Julia Llerena presenta entre planchas de vidrio como en una vitrina, como en un archivo, evocando nuestra necesidad de reunir y clasificar. Poseer esta pieza es, por tanto, una declaración de intenciones para cualquier coleccionista.

Diálogo sobre un poeta, una manzana y una retícula (Parte dos) III (2019), de Jorge Méndez Blake. Galería Travesía Cuatro.

Precio: 2.000 euros.

Por qué comprarlo: Méndez Blake es un artista mexicano que explora las relaciones entre arte, literatura y arquitectura. Es uno de los fichajes más prestigiosos de Travesía Cuatro, y ha expuesto en lugares como el Museum of Latinamerican Art de Los Ángeles y la Fundación Jumex de Ciudad de México, y entre las colecciones que cuentan con él destaca la Pérez Collection de Miami. De nuevo, no hay mucha obra suya en este rango de precios.

Más de 2.000 euros

Sin título (2019-2021), de Damaris Pan. Galería Cibrián.

Precio: 2.500 euros.

Por qué comprarlo: La pintora Damaris Pan acaba de obtener el premio Gure Artea que otorga el gobierno vasco, que en años anteriores fue a parar a artistas del prestigio de Esther Ferrer, Ana Laura Aláez o June Crespo. La peculiar tensión entre abstracción y figuración de Pan la convierten en una autora muy personal.

Mr. Dollar (2014), de Hans-Peter Feldmann. Galería Projecte SD.

Precio: 2.530 euros.

Por qué comprarlo: Se trata de otro caso de artista de gran prestigio internacional al que es posible acceder gracias a unas obras no únicas pero que mantienen la calidad del resto de su trabajo. Esta es una obra muy representativa de Feldmann, un clásico de la documenta de Kassel o la Biennale de Venecia, que reúne imágenes y objetos encontrados para hablar de cuestiones individuales y sociales.

Untitled (Couple) (1985-2017), de Steven Arnold. Galería Espacio Mínimo.

Precio: 3.000 euros.

Por qué comprarlo: Cineasta, escenógrafo y fotógrafo entre muchas otras cosas, Arnold fue uno de los artistas norteamericanos más originales de finales del siglo XX. Dalí y Warhol se contaban entre sus admiradores. Fallecido a causa de la pandemia del SIDA en 1994, dejó una obra muy variada en la que destaca esta serie de fotos que condensan su original y barroco universo creativo.

Messerschitt 37/31 (1977-2019), de Imi Knoebel. Galería La Caja Negra.

Precio: 3.000 euros.

Por qué comprarlo: Knoebel es un grande del minimalismo alemán. Digno heredero de los constructivistas rusos o de la escuela de la Bauhaus, su obra, siempre reconocible, es habitual en las grandes ferias de arte internacionales, o en exposiciones como la que este año le dedicó la Dia Art Foundation de Nueva York.

Conticinio #9 (2021), de Alain Urrutia. Galería Pelaires.

Precio: 3.000 euros.

Por qué comprarlo: Artista vasco residente en Berlín, Urrutia es un pintor figurativo que siempre logra aportar misterio a sus imágenes, que se nos presentan como momentos mágicos con referencias al cine y la historia del arte. Todo eso está presente en este paisaje en blanco y negro que recuerda a la poesía que encierran los fotogramas del mejor cine mudo.