Calviño y Publidis
Madrid,|
Es un tren legendario, pícaro y pobretón, además de muy lento. El banco azul plastificado de su segunda clase hace las veces de baño turco a la española. La viajata dura 15 horas para cubrir algo más de 1.000 kilómetros. Un solo empleado, el interventor, cuida de la suerte de 900 viajeros que aguantan una tremenda paliza.
Ayer se cumplió el 38º aniversario del acontecimiento que marcó el final de la guerra mundial y el inicio de la guerra fría