Patatas guisadas con costilla
El tubérculo más popular y una parte económica de ese animal del que se aprovecha todo se juntan con un sofrito para formar un estofado sencillo pero sabroso. Las hortalizas, especias o hierbas aromáticas son opcionales.
Los estofados siempre son platos siempre reconfortantes, con el placer de comerlos anticipado por el aroma que nos llega mientras hacen chupchup y suele hacer que las personas que tienes alrededor se vayan acercando a preguntar qué hay de comer o cenar y comentar “qué bien huele”. Este de patatas con costilla es un clásico que combina el tubérculo más popular en este tipo de guisos y un corte económico -y con hueso, que aportará sabor a la salsa- de ese animal del que en este país nos gustan hasta los andares.
En Ávila y otras zonas del interior se preparan con costillas adobadas y oreadas, una manera tradicional de alargar la vida útil de la carne de cerdo; como no las venden así en todas partes, usaremos las hierbas y especias que le dan sabor -pimentón y orégano- para conseguir un efecto parecido, aunque también podríamos añadir unas hebras de azafrán, o cambiar las especias y las hierbas por nuestras favoritas. Lo que queremos conseguir es un estofado con una salsita trabada y gustosa, algo que nos facilitará el hecho de chascar las patatas para que suelten el almidón en lugar de cortarlas.
La versión tradicional es de la frugalidad que solemos encontrar en este tipo de platos: un poco de carne para dar sabor y enjundia, patatas para que cunda y un sofrito con cebolla como base de todo. Podemos respetarla o ponernos contemporáneos y añadirle otros ingredientes que nos gusten o tengamos en la nevera: no le veo fallo a ponerle unas alcachofas cortadas en cuartos, unos trozos de zanahoria, calabaza o chirivía o unos champiñones, añadir un par de tomates rallados al sofrito o rematar todo con una picada de a base de frutos secos, ajo y perejil que añadiremos diez minutos antes de finalizar la cocción.
Dificultad: Lo más difícil es cortar las costillas y ya las habrás comprado así.
Ingredientes
Para 4 personas
- 1 cebolla grande
- 4 dientes de ajo
- 6 o 7 patatas viejas medianas (aproximadamente 1 kilo)
- 600 g de costilla de cerdo troceada
- Pimentón dulce, picante o ahumado (o combinados)
- Agua, caldo o vino blanco
- Orégano
- Aceite
- Sal
- Perejil
Instrucciones
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