Junts avisa que no investirá a Sánchez “a cambio de nada” y ERC llama a negociar: “O Cataluña o Vox”

Cataluña ha tenido un papel clave en el aguante de los socialistas a nivel nacional y en la desactivación de una mayoría absoluta de PP y Vox. El Partit dels Socialistes de Catalunya registró su mejor resultado en 15 años en unas elecciones generales y cosechó 19 de los 48 diputados en disputa, lo que le permitió encabezar el recuento y proferir un duro varapalo a las fuerzas independentistas que quedaron relegadas en el tercer puesto, en el caso de ERC, y en cuarta posición, en el caso de Junts. Estos partidos, sin embargo, serán claves para cualquier acuerdo que permita a Pedro Sánchez mantenerse en La Moncloa y esta noche ya se han posicionado en sus demandas. Esquerra Republicana, tras perder casi la mitad de sus diputados, dio señales de querer mantener su apoyo a Sánchez y llamó a sus rivales de Junts a hacer lo mismo por la vía de un gran acuerdo independentista con el PSOE que evite una repetición electoral e incluya objetivos comunes. Junts fue menos claro en sus demandas: “no haremos presidente a Sánchez a cambio de nada”, dijo su candidata Míriam Nogueras. Tanto ERC y Junts tienen siete diputados cada uno.

Los socialistas fueron quienes mejor supieron colocar el mensaje del voto útil y consiguieron crecer en ocho diputados a costa de sus socios parlamentarios de Esquerra Republicana y, en una maniobra todavía más difícil, sin perjudicar a sus socios de Gobierno de Sumar. Esquerra perdió seis diputados y Sumar-En Comú Podem mantuvieron los siete que consiguieron hace cuatro años. El PSC arrasó en todas las zonas más pobladas de Cataluña, con Barcelona en cabeza, y ganó holgadamente en las cuatro provincias.

El reverso de la noche tuvo lugar en las sedes de los partidos independentistas. ERC pasó de ganar las elecciones de noviembre de 2019 a quedar en tercera posición. Ello no hace más que debilitar el ya precario Gobierno de Pere Aragonès en la Generalitat. Lo de este domingo fue la continuación del viacrucis iniciado en las elecciones municipales, cuando el electorado independentista evidenció una gran desmovilización tras años de disputas entre las formaciones secesionistas y sin que se haya visto ningún tipo de avance en la agenda hacia la independencia. El independentismo pasó del 42% de los votos en 2019 a un 27% anoche. En diputados han pasado de 23 a 14, en medio de una sensación de que los acuerdos de ERC con los socialistas no les han dado ningún rédito ni a nivel nacional ni en las elecciones municipales.

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Sin embargo, el papel de estos 14 diputados será clave para cualquier negociación que quiera emprender el PSOE para investir a Sánchez. Durante la campaña, Junts ha asegurado que solo hablaría con el PSOE si hay un compromiso para un referéndum de independencia, una condición inasumible para los socialistas. Anoche, la candidata Míriam Nogueras, encuadrada en el ala más dura del independentismo, evitó pronunciar la palabra referéndum. Sí dijo: “no haremos presidente a Pedro Sánchez a cambio de nada”. Recordó al presidente los “deberes que tiene pendientes con Cataluña” e insistió en que su prioridad “no es la gobernabilidad de España, sino Cataluña”. A Esquerra Republicana la emplazó a sumarse a la propuesta hecha en campaña, que incluía la reivindicación del referéndum, palabra que, sin embargo, Nogueras no utilizó en su discurso de valoración de los resultados. Tampoco se refirió explícitamente al referéndum el expresidente de la Generalitat y líder ideológico de Junts, Carles Puigdemont. Desde Bélgica, donde permanece huido de la justicia española, Puigdemont se mostró orgulloso de “haber aguantado la posición”. No dio pistas sobre qué hará respecto a los pactos, pero sí dijo que “dentro de la imperfección podemos presentar un alto grado de responsabilidad, coherencia y fidelidad”. Su mensaje en Twitter acabó diciendo: “mañana será otro día [en el exilio también] y tenemos que continuar defendiendo Cataluña contra los que nos quieren liquidar la lengua, la cultura y la nación”.

En el caso de ERC, el mensaje del candidato Gabriel Rufián fue más conciliador con los socialistas. “Si quieren gobernar su país, tendrán que respetar el nuestro, interpelamos al resto del independentismo para que nos pongamos de acuerdo; bajo nuestro punto de vista lo podemos hacer”. Al mismo tiempo, afirmó que “sería un fracaso no ponernos de acuerdo y que la gente tenga que votar eternamente”. “O Cataluña o Vox”, resumió Rufián. Las tres propuestas que ERC tiene para negociar una posición común con Junts son: mantener la mesa de diálogo entre el Gobierno y la Generalitat, reducir el déficit fiscal y el traspaso de los trenes de Cercanías. El referéndum no forma parte explícitamente de las reivindicaciones que ERC ha hecho hasta ahora.

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