Las noticias más destacadas de la Comunidad Valenciana en 2023: del cambio de Gobierno a la ampliación del puerto

2023 ha sido un año de cambios en la Comunidad Valenciana. Sobre todo, de cambios políticos que han llevado a otros cambios sociales, económicos y culturales. Pese a que ese cambio político no llegó hasta mayo -con la celebración de las elecciones autonómicas y el triunfo del PP que, con los votos de Vox, desbancó al Gobierno del Botánico, formado por socialistas, Compromís y Podem- los primeros meses del año también estuvieron marcados por la contienda electoral y una retahíla de colectivos, empresarios y trabajadores reclamando promesas.

Durante este año también ha habido cosas que no han cambiado. La infrafinanciación de la Comunidad Valenciana, esa que cubre los servicios públicos esenciales, se ha cronificado y sigue sin solventarse. Tampoco el déficit hídrico, por el que los primeros meses fueron un ir y venir de recursos ante el recorte del trasvase Tajo-Segura. La Casa de la Caridad de Valencia aumentó un 15% las personas atendidas y la violencia machista acabó con la vida de seis mujeres.

Cambio de Gobierno: El 28 de mayo, el popular Carlos Mazón desbancó al socialista Ximo Puig de la presidencia de la Generalitat. Lo hizo con un acuerdo express, tras una reunión de dos horas, con los dirigentes de la ultraderecha de Vox, a quienes abrió la puerta del Gobierno autonómico y de la presidencia de las Cortes Valencianas. Esas elecciones reflejaron la fuerza del PP y la resistencia de los socialistas valencianos que, en cualquier caso, no fue suficiente para paliar la caída de Compromís, sin Mónica Oltra, y la desaparición de Unides Podem. También evidenció el ascenso de Vox pero por debajo de lo esperado. El PP también se impuso en las tres capitales: en Valencia y Castellón apoyado por la ultraderecha y en Alicante con una mayoría holgada.

Los personajes tras el cambio: El cabeza de lista de Vox, llegó a línea de meta pero no la cruzó. El veto de la dirección nacional a Carlos Flores Juberías, condenado por violencia machista 20 años atrás, le obligó a apartarse de la política autonómica. En su lugar, el líder de la ultraderecha, Santiago Abascal, colocó al extorero Vicente Barrera, que cruzó esa línea de meta sin haber hecho la carrera y, en horas, se convirtió en vicepresidente de la Generalitat y consejero de Cultura, una de las tres carteras que los populares dejaron en manos de Vox. La sorpresa que supuso la designación de Barrera fue tanta como el hecho de que en los seis meses que lleva en el Gobierno no se haya sometido a una rueda de prensa. Otros dos candidatos de su partido fueron protagonistas. El diputado y aspirante a la presidencia del parlamento autonómico, José María Llanos, afirmó que la violencia de género “no existe” y anuló la posibilidad de aspirar al cargo ante la respuesta crítica de todo el espectro político, a excepción de su partido. Le sustituyó la antiabortista y ultracatólica Llanos Massó que dirige las sesiones de las Cortes en las que está representado el pueblo valenciano.

El resultado de las elecciones también influyó en el expresidente, Ximo Puig. Aguantó la celebración de las generales, en julio, la formación del gobierno de Pedro Sánchez, en el que no se le incluyó, y, finalmente, ha optado por dar “un paso atrás” y abrir el proceso para la elección de un nuevo líder, o lideresa, de los socialistas valencianos.

Las áreas del cambio: El cambio que propugnaba Carlos Mazón ya se entrevé. En la primera reunión del Gobierno autonómico, se aprobó la prometida supresión del Impuesto de Sucesiones y Donaciones. También ha salido adelante la anulación de la tasa turística non nata. La presencia de Vox, en la Generalitat y en las grandes ciudades valencianas, no ha defraudado. Las previsiones de gasto incluyen una aportación a la Fundación Toro de Lidia, se han anulado varios carriles bici y el tráfico ha vuelto al centro de Valencia, sin consideraciones medioambientales que valgan. Los homenajes a las víctimas de violencia machista no tienen un lema común de apoyo y se han suprimido enseñas o emblemas LGTBI en balcones y fachadas de instalaciones municipales en el único pueblo en el que gobierno la ultraderecha, apoyada por el PP. En un municipio de Castellón se han retirado del área infantil y juvenil de la biblioteca municipal todos los libros de temática LGTBI, algo que pretenden que se extienda a todas las bibliotecas públicas, y decenas de profesionales de distintos sectores culturales coincidieron en denunciar en julio, a través de sus redes sociales, “el retorno de la censura que está atentando contra la libertad de expresión, un derecho consolidado socialmente y democráticamente en nuestra constitución”, tras la retirada y cancelación de varios espectáculos.

El caos del inicio de curso: La adjudicación de plazas de profesores de primaria, secundaria, FP, escuelas de idiomas y escuelas de adultos sufrió hasta cinco modificaciones y una semana antes del inicio del curso escolar, cerca de 20.000 docentes no sabían aún su destino. Más de un millar de alumnos sufrieron después las consecuencias de falta de transporte escolar. En este último trimestre, la consejería de Educación ha puesto encima de la mesa su modelo: la vuelta al distrito único, un sistema que rechazan sindicatos, asociaciones de padres y madres de alumnos y los partidos de la oposición, y la supuesta libre elección, por parte de los padres, de la lengua vehicular en la que estudiarán sus hijos, lo que les dará entrada a opinar sobre una parte del proyecto pedagógico de los colegios.

El fin de una reivindicación histórica y la actividad económica: Apenas diez días antes de que concluya el año, el Gobierno dio luz verde a la ansiada ampliación norte del Puerto de Valencia, una inversión público-privada mil millonaria sobradamente reclamada por los empresarios. El proyecto tiene su oposición por la repercusión medioambiental y será el mismo Gobierno el encargado de vigilar que la sostenibilidad que predica se lleve a término con todas las garantías. También este año la empresa filial de Volkswagen, PowerCo, inició las obras de la gigafactoría de baterías diseñada para Sagunto, mientras la incertidumbre se focaliza en Ford, que ha retrasado sus planes de electrificación por la baja demanda del mercado lo que incrementa la fragilidad de su planta en Almussafes. En este 2023, además, cerró una industria centenaria, Marie Claire, que ha dado trabajo a una comarca del interior de Castellón durante más de 100 años y el sector cerámico ha visto como caían las ventas, la producción, la facturación y el empleo y sigue esperando ayudas que permitan reflotar la industria.

El turismo no falla: El sector que no ha fallado ha sido el del turismo, recuperado tras la pandemia y con la desestacionalización avanzando a cifras récord, sobre todo, en Alicante. Muestra de ello ha sido la compra de la ciudad de vacaciones Marina d´Or donde el Grupo Fuertes (elPozo) y Magic Costa Blanca, con 50 años de trayectoria en el sector turístico, ha anunciado una inversión de 40 millones de euros para relanzar un proyecto que murió de éxito.

El valenciano: Carlos Mazón anunció una ley de señas de identidad valencianas que aún no ha visto la luz. Pero donde la polémica ya está servida es con el valenciano, cuando durante años el PP ha consensuado las grandes decisiones. Vox, que nunca utiliza esta lengua, abogó por utilizar un valenciano no normativo y, aunque se encontró con la oposición inicial del PP, la Generalitat ya ha entregado a la Acadèmia Valenciana de la Llengua, el único ente normativo, los nuevos criterios para el uso de esta lengua, cooficial y autóctona, en la administración. Mientras, desde la consejería de Cultura se ha apoyado económicamente a entidades que apuestan por un valenciano no normativo y se ha recortado o retirado el apoyo a quienes promueven la normalización ortográfica del valenciano.

Luces y sombras en la cultura: Uno de las decisiones culturales más sonadas fue la de la destitución del director del Centre del Carme. Cultura Contemporània de Valencia, José Luis Pérez Pont, quien bajo su gerencia multiplicó por cuatro las visitas al centro y sobre la que centenares de personas vieron la mano negra, de vento y censura de Vox. Fuera del espectro de lo público, la luz llegó con la apertura del Centro de Arte Hortensia Herrero (CAHH), en Valencia, que alberga un centenar de obras de algunos de los creadores internacionales más cotizados del arte contemporáneo en el rehabilitado Palacio Valeriola, en el se han invertido 40 millones de euros.

Los juicios a la corrupción: La Comunidad Valenciana aún no puede separarse de la coletilla de la corruptela. Durante este año, el expresidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus (PP), fue condenado a cinco años de cárcel por malversación y prevaricación y el expresidente de la Generalitat, Francisco Camps (PP), fue juzgado y sigue a la espera de la sentencia por su presunta implicación en el caso Gürtel. “Como ciudadano, quedo a disposición de ustedes”, dijo Camps en su turno de última palabra para dirigirse al tribunal de la Audiencia Nacional.