¿Cuál es tu pieza favorita de Ikea? Responden los diseñadores y arquitectos que más saben de decoración

En los 77 años que lleva Ikea editando muebles no solo ha conseguido meterse en las casas de medio mundo, sino que además ha logrado ser reconocida por su buen diseño funcional, de estilo nórdico y a precios democráticos, una combinación difícilmente igualable. En estas casi oocho décadas ha producido piezas icónicas poor motivos a veces opuestos: desde una línea de edición limitada de sillas posmodernas de Verner Panton hasta la estantería Billy, que se ha erigido como el mueble más vendido del mundo por su sencillez, adaptabilidad a los distintos espacios, capacidad de personalización y diseño modular.

Las piezas de Ikea tienen la virtud de gustar en la misma medida al público general que a los disñadores y arquitectos con los criterios más exigentes. Por eso, les hemos pedido a los profesionales del sector que elijan su objeto favorito de la casa sueca, aquel con el que más trabajan en sus proyectos o incluso con el que decoran sus casas. El resultado es una lista tan ecléctica y versátil como el propio espíritu de la firma.

Teresa Sapey - Botes de cristal 

"Tengo las casas invadidas con los tarros de cristal y tapa de aluminio para almacenar la comida", reconoce la arquitecta italiana Teresa Sapey. "Los tengo en todos los tamaños, para guardar especias, pasta, arroz, sal, azúcar, harina, le pongo y le quito etiquetas… En cualquiera de mis casas encuentras esos tarros. Otra cosa que uso mucho son las perchas. También me encantan las mantas con colores o dibujos. Si se quiere un objeto exótico, lo que me gusta más de Ikea son los muñequitos para niño que me hacen soñar y me divierten muchísimo. En objetos más de diseño tengo muchísimas cosas de Ikea, lámparas, camas, pero francamente lo que más uso son cosas de utilidad, más que de estética".

Guiller García-Hoz - Lámpara Sinnerlig 

Esta lámpara de rejilla de bambú es la elección de Guille García-Hoz: "Aporta calidez y si le pones una bombilla transparente proyecta unas sombras chulísimas en el techo. El montaje es sencillísimo: las partes de arriba y abajo van metidas dentro de la pieza central y solo hay que estirar de ellas y desplegarlas para que la luminaria quede lista para usar; de este modo, se abaratan los costes de transporte, un tema que los suecos controlan a la perfección. Además la acaban de bajar de precio. La puedes ver en librerías, restaurantes y hogares. ¡Yo tengo dos!".

"Es un producto que brilla por su aparente sencillez monomaterial y a la vez ofrece un despliegue funcional ilimitado", nos explica Clàudia Raurell. "Desde ese lugar desacomplejadamente secundario y poco pomposo –como cualquier objeto diseñado desde un ánimo puramente resolutivo–, el tablero Skådis ofrece un surtido de posibilidades extremadamente elástico. Este repertorio es seguramente lo más interesante de su potencial formal y funcional: no solo ejecuta su rol como pieza de almacenaje, también genera un sinfín de texturas, ruidos, composiciones que transforman y definen el espacio que está ocupando".

Felipe Araujo - Librería Billy 

"El que esté libre de Billy que tire la primera piedra", reconoce con humor Felipe Araujo, del estudio de interiorismo Egue y Seta. "No se puede ser más versátil y 'tuneable': colores, acabados, medidas, puertas, tiradores, altillos, patas, luz… Y aun así, es discreta, armoniosa y cede protagonismo a algo de lo que creo que deberían estar llenas todas las casas: ¡libros!".

Mónica Garrido - Sofá Farlov 

"Este sofá me parece un espectáculo y muy confortable", confiesa la interiorista Mónica Garrido. "El diseño con una sola colchoneta en asiento y dos en respaldo le dan un aspecto más ordenado y ligero. Además, tiene una variedad muy amplia de fundas de diferentes tejidos que ayudan a decorar un espacio según la imagen deseada".

También añade a su selección alfombras, como la Morum, "una pieza indestructible a la intemperie que te ayuda a dar solidez y crear un potente punto focal en salones y comedores exteriores" o tiradores de cocina: "Me encantan los diseños que tienen y la relación calidad-precio. En particular Mollarp y Borgha. Ahora han sacado uno nuevo en bronce, Nydala, espectacular".

"Elegir una pieza favorita en Ikea no es un concepto absoluto sino circunstancial, según el momento, una diferente es la que nos cautiva", desarrolla Carlos Hernández, de Estudio b76. "Hoy, ahora, soluciona nuestras necesidades de estanterías para nuestra futura sede y nos satisface estéticamente Svalnäs. Su diseño ligero de madera de bambú y flejes metálicos es una combinación perfecta para soportar los catálogos y muestras de productos varios que inevitablemente decoran y dan sentido a nuestro espacio de trabajo".

Mar Vera - Silla PS Vago

"Me encanta su estética protominimalista. Es una silla muy de cine. La visualizo en cualquier película de Jacques Tati", contesta Mar Vera de Welcome Design. "Adoro sus formas curvas y que esté hecha de plástico. Aunque esté denostado, el plástico supuso la democratización del diseño en los sesenta. Como diseñadora pienso que es un buen momento para este material. Hay mucho que reciclar y ha llegado la hora de convertir todos esos plásticos de un solo uso en diseño útil y divertido. ¡Toda una filosofía muy Ikea!".

Diana García Carretero - Armario Stockholm

"Encuentro este armario súper actual y en tendencia en cuanto a materiales y estructura", comenta Diana García Carretero, de Egue y Seta. "Es lo típico que hace Ikea: coger un modelo carísimo y darle la vuelta. Reinterpretarlo hacia lógicas de construcción y materiales que lo hacen accesible a un público más amplio. Ponerlo al alcance de muchos".

Mercedes Rivera - Sillón Stockholm 

También de la serie Stockholm es la elección de la interiorista Mercedes Rivera, pero en su caso se trata del sillón. "Una propuesta veraniega que apuesta por la sencillez y los materiales naturales como el ratán. Me parece una pieza atemporal y ligera que puede encajar en cualquier espacio aportando luz y frescor".

Cristian Vivas - Silla Vilbert 

En Ikea también hay ediciones únicas y piezas vintage, y por una de ellas, las sillas Vilbert de Verner Panton (1993), opta el arquitecto Cristian Vivas. "Destaca por su abstracción geométrica y por el tratamiento del color, pero lo que más me gusta de esta pieza es su ambigüedad como objeto. Es una silla, pero funciona como una pieza de decoración, es casi una escultura aunque la puedes utilizar como mesita auxiliar o la podrías tumbar y usar como revistero. Actualmente es una pieza de coleccionista, se puede encontrar en tiendas vintage".

"El mercado está lleno de sofás preciosos, pero incómodos", opina Verónica Galli Horro, de Egue y Seta. “Este, en cambio, lo he probado y es tan amable con los ojos como con los riñones. Lo han sacado, además, en una gama de tapicerías en colores muy actuales y combinables. Lo encuentro ligero y elegante".

Natalia Zubizarreta - Aparador Ikea PS 

"En blanco", especifica la interiorista Natalia Zubizarreta. "Debo reconocer que el armario Ikea PS en rojo me asusta. Es una pieza metálica que recuerda a las taquillas de trabajo. Su mantenimiento es muy fácil y es terriblemente versátil en cuanto a usos: mueble de televisión, zapatero, archivador, almacenaje de juguetes… Lo que me más me gusta de este clásico icónico de Ikea (es del año 98) es que queda bien en cualquier tipo de espacio, ya sea moderno o clásico. Moderno por sus líneas limpias, rectas y el metal con el que se fabrica. Y clásico por ese toque vintage que tiene tan de taquilla antigua".

Rocío Olmo - Estantería Enetri (en blanco)

"La compré hace un año más o menos y no solo es mi pieza favorita de Ikea si no casi de toda la casa", reconoce la diseñadora gráfica y de interiores Rocío Olmo. "Me encantan las estanterías llenas de libros y recuerdos y esta es perfecta porque tiene un diseño minimalista que me recuerda a los muebles de los noventa, funcional pero con intención. Lleva unas piezas de metal lacado en blanco que son el soporte y es el detalle que la hace diferente. Además, al ser baldas sin laterales queda mucho más ligera y puedes jugar con lo que colocas en ella, yo tengo libros mezclados con plantas, una lámpara de mesa, cajas en el suelo, marcos de fotos. No es un clásico de Ikea pero podría llegar a serlo, siempre se la recomiendo a mis amigos cuando buscan una estantería económica pero con diseño".

Emma Charles - Flexo Riggad

"Una lamparita que podría costar cuatro veces lo mismo", sentencia Emma Charles, de Egue y Seta. "De una sencillez pasmosa pero resuelta hasta un nivel de detalle más característico de casas especializadas en iluminación o de un artesano. Con una óptica y una temperatura de color preciosas. Ya lo del cargador es un súper plus, pero me gusta por mucho más que eso".

“El diseño de esta silla me parece extraordinario, combina el minimalismo de la pieza con el acabado curvo de la estructura del asiento", responde la diseñadora de interiores Lorna de Santos. "La combinación de acabados en blanco, madera de roble y tapizado gris claro se identifica mucho con mis proyectos, por lo que suelo recurrir a ella para despachos en viviendas y mesas de estudio de niños. La combino con mesas voladas de madera, con mesas exentas blancas o grises o incluso en salas de juntas. Se desmonta muy fácil y su precio es asequible para todos los rangos de presupuestos".

Marta Ayala - Bolsa Frakta

Este básico inesperado es la elección de la diseñadora de muebles Marta Ayala. "Siempre me ha fascinado ese tipo de azul y en mi opinión es una de las piezas más versátiles de la marca. Lo que me parece más interesante es su capacidad para ofrecer otras funciones diferentes para la que fue diseñada y la posibilidad de transformarla en otros objetos. Actualmente hemos reconvertido varias de estas bolsas en contenedores para el huerto que tenemos en el estudio".

"Taburete, escalera o hasta una mesa de noche", matiza Sarah Salas, de Egue y Seta. "Es una pieza muy sencilla pero muy versátil [en la imagen que abre este artículo]. Confieso que me entretiene verla siempre en un color distinto en cada casa o cómo cada uno le da el uso y el color que desea. Como profesional, sé que no es la pieza de diseño más singular del catálogo de Ikea, pero definitivamente, es un artículo fácil de comprar y adaptar a cualquier espacio. Además, teniendo en cuenta la altura que suelen tener algunos armarios y la media de estatura de nosotros, los no escandinavos, pareciera que el taburete tiende a ser un artículo necesario. En particular, cada día imagino una forma diferente de intervenir esta escalera en mi casa".

Trestrastos - Serie Ivar 

"Es nuestra colección preferida; usamos mucho en nuestros proyectos el armario de puertas", nos explican en el estudio de interiorismo Trestrastos. "Nos gusta mucho porque es un básico muy combinable, personalizable y tiene un precio imbatible. Además, al ser de madera natural tiene ese carácter de autenticidad que siempre buscamos".