Denunciada ante la Agencia Española del Medicamento la clínica que ofrece inyecciones en el pene
La Red de Terapia Celular pone en manos de la inspección un tratamiento que considera fraudulento
La Red de Terapia Celular Española del Instituto de Salud Carlos III ha denunciado ante la Agencia Española del Medicamento (AEMPS) las prácticas de Doctor Life, una clínica especializada en tratamientos hormonales. El centro ofrece por unos 2.000 euros una terapia mediante una inyección de células madre en el pene para fortalecer la erección y agrandar su tamaño, supuestamente.
"Creemos que se trata de una información fraudulenta que atenta contra la salud pública y que enturbia y da una imagen muy negativa para la terapia celular y el prestigio de los científicos españoles, particularmente de TerCel, que llevamos años siguiendo escrupulosamente el método científico de células madre con análisis preclínicos y ensayos clínicos (EC)", se lee en la comunicación que José María Moraleda, coordinador de TerCel, ha hecho llegar a la AEMPS.
La red colabora con el comité de buenas prácticas para evitar este tipo de fraudes, como podría ser el caso de la clínica que abrió hace unos meses en el centro de Madrid. Sus responsables, al igual que otros colegas especialistas en células madre, consideran que en este caso se usa el término de mala fe, ya que la terapia que ofrece en realidad solo separa de la sangre el plasma rico en plaquetas (PRP) para después volver a inyectarlo. La literatura médica que hay al respecto no considera probado que este tratamiento funcione, más allá del efecto placebo que pueda producir.
La responsable médica de la clínica, la cirujana Rebeca García, defiende el tratamiento que ha bautizado en España como Priapus Shot. Su equipo de comunicación lo publicita como una "revolucionaria terapia hormonal". La clínica sostiene que la inyección, que forma parte del grupo de tratamientos Vampire para mejorar las funciones sexuales del hombre (dados a conocer por las hermanas Kardashian en Estados Unidos), actúa de forma natural y efectiva, sin ningún tipo de efecto secundario ni de rechazo.
En un correo electrónico, un asesor científico de la médica aclaró sobre el tratamiento que en realidad en la clínica hacían PRP, no células madre. "El uso de células madre está en fase uno pero eso va a ser en el futuro (si se demuestra que funciona correctamente)", escribió.
La inspección de la AEMPS trabaja desde este lunes en el caso. En una primera impresión tras recibir la denuncia, la agencia cree que hay indicios de que pueda tratarse de un fraude.
La clínica se preocupa mucho por su reputación. A los comentarios negativos en Google siempre responde con la misma fórmula: “Estimado usuario, en contestación al comentario realizado en nuestra web a través de Google, le comunicamos que, una vez realizadas las averiguaciones pertinentes, no existe en los archivos de los pacientes de esta clínica, ninguna persona que encaje con el perfil comentado por usted, por lo que entendemos que el mismo es falso, le rogamos proceda a retirarlo de forma inmediata o nos veremos en la obligación de formular demanda penal para averiguar la IP desde donde se ha enviado con el seudónimo XXX y proceder penalmente contra su autor por un posible delito de injurias, falsedad en documento informático y suplantación de identidad”.
Una usuaria que dice haber ido a la clínica ha dado su opinión con nombre y apellidos en los comentarios de Google a pesar de las advertencias de la empresa: “Mi opinión: el personal es agradable, fui a consultar un problema hormonal. Ahora bien, todo lo demás es de chiste. Hasta el nombre de los tratamientos 'rubi' y no sé qué suenan a estudio de uñas más que a un centro médico. Así que no sé, me parece un sitio poco serio, y profesional... así así”.
Lea el reportaje publicado este fin de semana sobre esta terapia: Una 'milagrosa' inyección en el pene.
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