_
_
_
_

La gasolina no solo afecta a sus pulmones

A la piel también; se oxida y llega el envejecimiento acelerado: manchas, arrugas, flacidez. En su mano está mitigarlo

El 95% de los españoles respira aire contaminado, según la OMS. La contaminación no solo tiene efectos adversos en nuestros pulmones: también se carga la piel. El Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) de Estados Unidos, y varios informes realizados en Asia, señalan que los hidrocarburos producen oxidación e inflamación en la dermis al activar un receptor cutáneo llamado AHR (receptor de hidrocarburos de arilos). Y también generan radicales libres, provocando la inflamación y la alteración de la función de barrera y la microflora de la piel, según la publicación Journal of Investigative Dermatology.

Por su composición, la polución es un cúmulo de agentes nocivos. “Las partículas en suspensión son las que inciden directamente en la salud humana; luego está el dióxido de carbono, que aumenta por el uso de carburantes y es responsable del efecto invernadero, al igual que el dióxido de nitrógeno, entre otros”, enumera Xavier Querol, experto en contaminación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). ¿Cuáles son los más perjudiciales para nuestra piel? Prácticamente todos: un estudio de Olay revela que lo peor son las partículas en suspensión (algunas llevan más de 150 productos químicos diferentes), el dióxido de nitrógeno, el ozono y el dióxido de azufre.

Escudos para la piel

Conozca gratis en nuestra aplicación productos para combatir los efectos de la polución en su dermis.

Consecuencias: arrugas, flacidez, sequedad, lesiones precancerosas y esas manchas que erróneamente atribuimos a la edad. “La culpa es del hollín, formado por una mezcla de partículas de carbón cubiertas por hidrocarburos, que penetra con facilidad en la barrera cutánea”, explica la dermatóloga María José Alonso, del Hospital Torrecárdenas (Almería). Los efectos empeoran si somos fumadores. Como ha demostrado un estudio del laboratorio Clinique, inhalar humo tiene una relación directa con ese aspecto áspero, amarillento y arrugado tan característico de la piel de fumador, porque oxida la barrera externa de la piel (ya oxidada por la polución) y, a nivel profundo, el ADN.

Cremas ‘antihumos’

¿Podemos remediarlo? Isabel Aldanondo, jefa de Dermatología del Hospital Quirón San José (Madrid), recomienda la aplicación de cremas antioxidantes. “Su presencia bloquea los radicales libres”, afirma. “Las mejores son aquellas que llegan a la piel en su forma activa, en concentración suficiente y que contengan vitaminas C, E y ácido ferúlico ya que pueden multiplicar por ocho la capacidad antioxidante de la piel”.

El informe de Olay destaca la niacinamida (vitamina B3) para restaurar la barrera cutánea. Estas fórmulas se deben asociar a gestos cosméticos necesarios: hay que lavar la piel a diario para eliminar las partículas con jabones suaves o agua micelar y usar hidratantes que equilibren la barrera cutánea y fotoprotectores de amplio espectro. “Si ya se ha formado una mancha, se puede tratar con crioterapia, láser, peeling o con cosméticos que inhiban la melanina y contengan hidroquinona o retinoides”, detalla Alonso

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_