_
_
_
_

Eductrade: la empresa española que llena de hospitales Latinoamérica

La compañía especializada en proyectos de infraestructuras sanitarias y educativas ingresa 60 millones de euros, con un beneficio de 4,2 millones. Su próximo objetivo es entrar en el negocio del agua

Hospital Nueva Maternidad de Argentina, uno de los mayores mercados de Eductrade.
Hospital Nueva Maternidad de Argentina, uno de los mayores mercados de Eductrade.

Eductrade nació en 1976, pero no fue hasta 2018 cuando la compañía, especializada en la gestión de proyectos de infraestructura social en salud y educación, cogió las riendas de su destino. Ese año, un grupo de accionistas junto con inversores ajenos adquirieron la empresa, por cuatro millones de euros, que hasta entonces había estado en manos de Constructora Hispánica, sociedad integrada en el grupo Assignia Infraestructuras, que había entrado en concurso de acreedores. “Era la única que no tenía dificultades financieras dentro del grupo, pero parecía que nadie se ocupaba de ella”, asegura Francisco Mozos, director general de la compañía con sede en Madrid.

Aun así, los comienzos en solitario no fueron fáciles, cuenta Mozos. “Era complicado porque en ese momento no teníamos avales, no podíamos presentarnos a licitaciones y los bancos no apoyaban a una empresa que salía de un proceso concursal. Pero tiramos hacia delante con los proyectos que teníamos en Nicaragua, Argentina o Bolivia”, añade. Un inicio en el que también les tocó vivir la crisis sanitaria, aunque, según Mozos, no les afectó mucho pese a que no pudieron contratar. Lo solventaron con la cartera de obras que estaba en marcha al otro lado del océano. Incluso tuvieron que asumir trabajos ajenos, como un hospital en Nicaragua donde tenían un contrato para equipamiento sanitario por 100 millones de dólares (90,34 millones de euros), un 30% del total, y de cuya construcción también tuvieron que hacerse cargo al quebrar la empresa italiana que lo gestionaba. “Esta parte suponía el resto del presupuesto, para nosotros todo un reto. Tiramos hacia delante y salió bien”, apunta.

Con 270 empleados y un accionariado en manos de los directivos (un 15%), inversores privados y un fondo de capital riesgo español, se ha organizado en dos grandes departamentos: operaciones e infraestructuras en educación y salud. “Podemos construir una universidad, un hospital, equiparlo o dar capacitación. Pero el área de salud es la que más peso tiene en la compañía. Si la de operaciones supone el 90% de la facturación, esta concentra más del 80% de ese porcentaje”, señala.

En España, Eductrade apenas alcanza un 5% de su volumen de negocio. Desarrolla dos líneas de trabajo: la gestión privada de centros deportivos públicos (cuatro en la actualidad en la Comunidad de Madrid) y la del programa de enseñanza de inglés That’s En­glish, “una gestión que licitamos cada cinco años”, explica Mozos. Dos sectores que Eductrade ha convertido en su eje de referencia en España y con perspectivas de ampliar, pero sin planes de entrar en el negocio del equipamiento o la construcción de universidades u hospitales.

Argentina y Chile

El resto de su volumen de negocio llega desde Latinoamérica, centrado, sobre todo, en el equipamiento de hospitales. En la actualidad tienen diversos centros sanitarios en marcha, pero es en Argentina y en Chile donde radica su actividad más importante. En Argentina, donde operan con una plantilla subcontratada, se han adjudicado cuatro proyectos hospitalarios por valor de 92,8 millones de dólares (unos 83,97 millones de euros) en la provincia de Córdoba. Con fecha de finalización entre este año y el próximo, construyen la nueva maternidad, el Río III, además de la ampliación y remodelación del Villa de Dolores y el reequipamiento de diferentes hospitales públicos de la provincia.

También han aterrizado en Chile, donde pondrán en marcha cuatro hospitales (el de Los Lagos, el de La Unión, el de Puerto Varas y el de Río Bueno), que estarán operativos en 2027 y en los que Eductrade además gestionará el mantenimiento durante 15 años. Una obra que supone un desembolso de 206 millones de euros, de los más de 364 que representa el total de esta inversión. “Nosotros somos pequeños, no tenemos capacidad económica para asumir la totalidad”. Comparten el proyecto con GIA, constructora mexicana, y BlackRock, compañía de gestión de inversiones global.

En paralelo a estos proyectos, también están inmersos en la construcción y el equipamiento de hospitales en otros países como Bolivia, Perú o Nicaragua.

Al margen de este sector, han dado una vuelta de tuerca a su actividad principal y han llegado a Costa Rica, un país conocido por su anterior participación en proyectos hospitalarios, y donde actúan en colaboración con un socio local, para entrar en un nuevo sector que, según augura Mozos, es una apuesta de largo recorrido. Se trata de la construcción de pasos de control fronterizo financiados por el Gobierno estadounidense. Ha ganado dos concesiones en la frontera de Panamá por valor de 40 millones de dólares cada una. “Las hemos ganado junto con Sacyr o Acciona. Nosotros que somos un enano frente a estos gigantes. Así que no vamos a parar aquí y volveremos a licitar nuevas concesiones”, señala Mozos.

La suma de proyectos les ha hecho crecer. En 2018 su facturación rondó los 12 millones de euros, con un ebitda de 300.000. El pasado año la cifra de negocio alcanzó los 60 millones de euros, con un beneficio de 4,2 millones. Para 2022 sus previsiones apuntan a facturar entre 70 y 80 millones. Para llegar a esta cifra, la empresa tiene previstas nuevas licitaciones en países de Latinoamérica que le reporten unos 55 millones de contratación. A su vez se plantean poner en marcha un plan estratégico que se desarrollará entre 2022-2025, “que estamos empezando y para el que buscaremos recursos, porque no es suficiente con el crecimiento orgánico”, asegura Mozos. Su apuesta pasa por la posible adquisición de una empresa española especializada en el sector del agua que les ayude a posicionarse y a entrar de lleno en este nuevo negocio donde, según el director general de Eductrade, la demanda en Latinoamérica es muy alta, sobre todo de plantas potabilizadoras y de distribución. “Para presentarnos a licitaciones de agua tenemos que conocer este sector, no somos especialistas. No queremos asociarnos, preferimos comprar, y mejor a corto plazo. Pero como nuestro objetivo es adquirir una compañía que vaya bien, el precio será alto, así que todavía estamos buscando opciones”, sostiene Mozos.


Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_