El Gobierno aprobará en mayo el ingreso mínimo para las familias más vulnerables
El ministro de la Seguridad Social detalla que la nueva ayuda social beneficiará a 100.000 hogares monoparentales
El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, anticipó este miércoles que el Gobierno aprobará el nuevo ingreso mínimo vital en semanas para las familias más vulnerables. Fuentes próximas al vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, explicaron que el martes acordaron con el presidente, Pedro Sánchez, aprobar la nueva renta mínima en mayo, una medida que ha despertado tensiones en el Ejecutivo. Escrivá detalló que la nueva ayuda social beneficiará a cerca de 100.000 hogares monoparentales. Está previsto que el Gobierno presente la medida este jueves.
Escrivá comparecía en el Congreso de los Diputados para dar cuenta de las políticas de su departamento. En su exposición inicial se dedicó a repasar y defender el paquete de medidas aprobadas por el Gobierno durante las últimas semanas para ayudar a trabajadores y autónomos a digerir la crisis del coronavirus. En la mente de todos estaba el próximo gran salvavidas para los más vulnerables, la renta mínima vital. Escrivá ya había avanzado en una entrevista publicada por EL PAÍS que la medida estaría lista “pronto”. Este miércoles lo acotó más. “Estará en semanas”, dijo ante los parlamentarios. Desde el entorno de Iglesias lo circunscriben al próximo mayo.
Fuentes de la vicepresidencia segunda confirmaron los planes de Escrivá. “El presidente Pedro Sánchez y Pablo Iglesias se emplazaron ayer [por el martes] a hablar por la tarde de la medida y los tiempos, y acordaron que el Gobierno va a poner en marcha el ingreso mínimo vital ya desde el próximo mes de mayo”. Las mismas fuentes remarcaron: “La medida la trabajarán conjuntamente el Ministerio de Seguridad Social y la Vicepresidencia de Derechos Sociales, y la presentarán este jueves".
Escrivá e Iglesias la presentan este jueves
El ministro subrayó que es “absolutamente” necesario adelantar esta renta “para evitar el sufrimiento de los más vulnerables”, que por ejemplo no hacen la declaración de la renta o están en economía sumergida. El diseño tomará los “mejores incentivos que existen en Europa” y conllevará itinerarios de inclusión al mercado de trabajo, como también existen en la renta del País Vasco.
En las últimas semanas se había producido un tira y afloja entre Escrivá e Iglesias a cuenta de la renta mínima. El ministro de Seguridad Social trabajaba desde principios de la legislatura en una ayuda que fuera estructural, analizaba las diferentes opciones y quería coordinarlo con las comunidades autónomas, que tienen competencias en la materia y ya han desplegado algunas ayudas similares. Iglesias, por su parte, quería adelantarla por la situación extraordinaria que ha provocado la crisis del coronavirus. El ministro de Unidas Podemos había propuesto crear un mecanismo “puente” mientras Escrivá terminaba la suya.
“[El ingreso mínimo] va a ser estructural, permanente, viene para quedarse. Aunque hay iniciativas bien intencionadas que están planteando algo extraordinario”, decía Escrivá en la entrevista en referencia a la propuesta de Iglesias. Finalmente ambas posturas han confluido.
Escrivá ofreció pocos detalles del nuevo instrumento social, que está llamado a ser una nueva pata del Estado de bienestar. No precisó el coste total de la medida para las arcas públicas, ni a cuántos ciudadanos podría beneficiar. “No será una prestación individual sino que pondrá el énfasis en los hogares y diferenciará según la estructura de estos hogares”, dijo. El ministro aseguró que esta renta reducirá la pobreza extrema “en cifras altísimas” y que los Ayuntamientos serán decisivos en su gestión.
La renta que se está diseñando “con mucho cuidado” será compatible y complementará las rentas de las comunidades autónomas. “No habrá ningún conflicto de competencias”, remarcó el ministro. Y explicó que sigue trabajando para definir totalmente la medida. Por eso, aún están cruzando datos con la Agencia Tributaria para precisar su alcance y su coste.
Cuatro millones de afectados por ERTE
Escrivá también adelantó que ya hay casi cuatro millones de trabajadores afectados por ERTE. Se trata, según dijo, del 16% de toda la población activa, lo que refleja el tamaño del impacto que ha sufrido la economía por el parón decretado a raíz de la pandemia.
Durante una comparecencia en la Comisión de Trabajo en el Congreso para detallar las políticas de su ministerio, Escrivá precisó que casi dos millones de afectados por ERTE ya están cobrando la prestación de desempleo. Y otros dos millones de trabajadores empezarán a cobrarla en mayo cuando se registren todos los expedientes. Las oficinas de empleo de las comunidades autónomas y del Servicio Público de Empleo Estatal, el antiguo INEM, están sufriendo un atasco por la avalancha de expedientes presentados desde el pasado 14 de marzo.
Escrivá defendió todas las medidas desplegadas por el Gobierno durante la última semana para mitigar los efectos de la crisis y la pérdida de rentas por el parón. Según el ministro el total de las medidas de protección de empleo han cubierto al 30% de la población activa.
Ayudas para 6,3 millones de personas
El ministro ha insistido en que se trata de unas medidas “sin precedentes, que son muy extensas y que podrán proteger las rentas de más seis millones de personas”, ya que esta protección de rentas “es la absoluta prioridad del Gobierno en este momento”.
El responsable de la Seguridad Social especificó que de los cerca de 6,3 millones de personas que reciben ayudas en esta crisis, unos cuatro millones percibirán la prestación por desempleo por haberse visto afectados por ERTE, otros 1,4 millones serán autónomos y unos 900.000 trabajadores, la mayoría temporales, han perdido el empleo y percibirán el subsidio por desempleo. También recibirán la prestación las empleadas de hogar y temporales sin derecho a prestación. Así mismo, añadió que más de 400.000 personas se han beneficiado de la prestación por incapacidad temporal asimilada a accidente de trabajo por contraer la covid-19.
El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, anunció la aprobación de una renta mínima, pero de carácter estructural, y no ve muy claro, como defiende el vicepresidente Pablo Iglesias, establecer un ingreso “puente” hasta que se tenga la renta mínima definitiva.
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