Funcas rebaja una décima la previsión de crecimiento de la economía española en 2019

La economía española crecerá un 2,2% en 2019, una décima menos de lo que se había previsto este julio, según las previsiones elaboradas por el panel bimensual publicado este lunes por el think tank Funcas. Estos pronósticos, que son una media de las ofrecidas por 19 servicios de análisis económicos entre los que se encuentran los servicios de estudio de entidades financieras,  energéticas y consultoras, son idénticos a los realizados el pasado abril por el Gobierno y en mayo por la OCDE. Tanto el Banco de España como el FMI tuvieron un cálculo más optimista este verano, cuando estimaron un crecimiento del 2,4% y el 2,3% respectivamente.

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Las previsiones se realizaron  durante este verano antes de conocerse el impacto de las turbulencias internacionales por el recrudecimiento de la guerra comercial entre EE UU y China, la crisis en Alemania y Reino Unido y las tensiones políticas en Hong Kong. Las proyecciones de Funcas llegan justo el día que el Instituto Nacional de Estadística ha presentado sus correcciones sobre el crecimiento de años anteriores y una nueva revisión a la baja de las mediciones de 2019.

Los analistas mantienen sus estimaciones de crecimiento para 2020 en el 1,9%. No obstante, advierten de que la desaceleración en el perfil trimestral (del 0,5% al 0,4%) comenzará antes de lo esperado y llegará en el segundo trimestre del año en lugar del tercero, como se dijo en el informe anterior. 

El estudio ha recalcado que espera una menor aportación de la demanda nacional (consumo público y privado) al PIB, frente al ligero aumento del sector exterior. Los expertos han rebajado la previsión del consumo privado y público, así como la inversión en capital fijo, especialmente en maquinaria y bienes de equipo.

El informe espera que la tasa de paro media anual se reduzca hasta el 13,9% en 2019, y el 12,8% el año siguiente, previsiones más altas que las anteriores. Según los datos de afiliación a la Seguridad Social, el ritmo de crecimiento del empleo ha continuado debilitándose en julio y agosto, siguiendo la tónica de la desaceleración económica. No obstante, se estima que el crecimiento del empleo se mantenga en el 2,2% para 2019 y en 1,6% para 2020.

Las previsiones para el déficit público se mantienen en el 2,3% del PIB para 2019 y el 1,9% para 2020. Esto supondría una desviación de tres y ocho décimas, respectivamente, de los objetivos del Gobierno.

La inflación bajaría su tasa anual tres décimas, hasta el 0,8% en 2019, mientras que la inflación subyacente cae una décima, hasta el 0,9%. La inflación de los productos energéticos ha hecho que por primera vez desde 2016 la inflación subyacente supere a la tasa general. Se espera que para 2020 ambas se sitúen en el 1,2%, aunque los cálculos se hicieron antes de que el precio del crudo se disparara por los ataques a la industria petrolífera en Arabia Saudí. No obstante, incluso sin tener en cuenta este último acontecimiento, el frenazo en el crecimiento económico que se esperaba tanto para la economía española como para la global está siendo más intensa de lo previsto, según los expertos del panel.