La Vía Láctea nace en Arequipa

En las madrugadas de Lima y muchas otras ciudades de Perú, es fácil cruzarse con una familiar furgoneta blanca con un letrero iluminado con la imagen de seis latas y un imperativo: “Toma más leche”. Son los vehículos de reparto del Grupo Gloria y el eslógan pertenece a su última campaña de publicidad. La multilatina tiene 35 empresas en Perú y 24 más en otros seis países latinoamericanos. El consorcio está integrado verticalmente en toda la cadena de producción láctea y sus derivados. Y aunque el origen y la fortaleza del grupo se sostiene en la producción de lácteos, el conglomerado cuenta con intereses en otros sectores, como el de la agro industria –cuenta con seis ingenios azucareros en Perú, Ecuador y Argentina—, el cartón, cemento, etanol, además de centros logísticos de envasado y transporte.

Las empresas más fuertes del grupo en Perú son Gloria y Cementos Yura, que, de acuerdo a Perú Top Publicaciones ­­—la principal clasificación empresarial peruana—, en 2014 tuvieron juntas, incluyendo sus subsidiarias, una facturación de unos 1,81 millones de dólares. Las ventas, según indica la memoria 2014 de Gloria, fueron un 10,2% mayores que en 2013. La cifra, según Perú Top, no incluye los ingresos de las empresas extranjeras del grupo. Solo en Perú, el año pasado Gloria copó el 81% del mercado de leches pasteurizadas y sus seis marcas de leche evaporada sumaron el 85% del negocio total. Además, crecieron del 75% al 83% de participación en el mercado de yogur desde 2013 al año pasado.

La estrategia del grupo, sin embargo, no sólo pasa por copar el negocio de la leche desde la producción hasta el consumidor final, sino también por ofrecer diferentes marcas teniendo en cuenta el cliente. En las operaciones de Perú y Bolivia ello se traduce en diferentes enseñas lácteas. Además de Gloria ­—la más antigua— están Pura Vida, Bella Holandesa, Soalé, Soy Vida, y Bonlé (para quesos)—. Pil es la marca y la empresa en Bolivia desde que el grupo peruano compró la compañía en 1999.

El lanzamiento de nuevos productos, la modernización de los envases, y la renovación de maquinaria son frecuentes en la estrategia del grupo. Gloria fue la marca más valorada en Perú en 2014, de acuerdo a un ránking elaborado por Young and Rubicam; y ocupó, en los dos últimos años, el primer lugar en Perú en Brand Footprint de Kantar World Panel, que mide la penetración de las marcas en los productos de alta rotación, mientras que Pil Andina ocupó el mismo puesto en Bolivia.

El consorcio cuenta con 35 empresas en Perú y 24 en otros seis países de la región

Hasta 2013, Gloria exportaba leche a 42 países, pero, de acuerdo a la Superintendencia de Aduanas, en 2014 llegó a más de 55 destinos, predominantemente en África, Centroamérica y Asia: Haití fue el principal comprador en ese período.

El origen de la empresa se remonta a febrero de 1941, cuando la compañía General Milk Company constituyó la empresa Leche Gloria en la ciudad de Arequipa. Ese mismo año emprendió la construcción de la planta industrial que en mayo de 1942 empezó a fabricar la leche evaporada. Posteriormente, Milk Company fue adquirida por Carnation Company y en el año 1978 Leche Gloria cambió su denominación a la que tiene actualmente. En 1985, Nestlé de Suiza se convirtió en propietaria por mayoría de Gloria al adquirir la empresa Carnation Company a nivel internacional.

En marzo de 1986, los hermanos Vito y Jorge Rodríguez Rodríguez, que en los años 80 eran socios en la empresa de transportes Rodríguez Banda, adquirieron el porcentaje mayoritario de las acciones de Gloria en manos de accionistas nacionales y en agosto de este año compraron el 60% de las acciones propiedad que la multinacional suiza Nestlé, que tenía en la empresa.

El sociólogo Francisco Durand, investigador de los grupos de poder económico en Perú, los describe en la revista Quehacer como un grupo emergente de origen provinciano, en oposición a los de la clase media y de la aristocracia limeña. El primero de los hermanos figura en el quinto puesto de los multimillonarios peruanos según la revista Forbes (puesto 1.533 en la lista mundial), con un patrimonio de 1.200 millones de dólares. El otro hermano es el sexto (1.712 en la misma clasificación global) con 1.050 millones de dólares.

El año pasado, el consorcio peruano invirtió 45,8 millones de dólares en una planta de producción de panettone, debido a que Perú es el segundo mayor consumidor mundial de este producto después de Italia. En abril, el diario El Comercio informó que empresas vinculadas a los accionistas del Grupo anunciaron la compra de activos de la firma de biocombustibles Maple Energy por 108 millones de dólares, que se declaró en suspensión de pagos. La operación le dará a Gloria la propiedad de 10.000 hectáreas de áreas de cultivo de caña de azúcar en la norteña región de Piura, una planta de producción de etanol y una de generación de energía.

En los últimos años ha crecido en los sectores del etanol y el cemento

También en 2014, mediante Yura Inversiones Bolivia, su subsidiaria del Consorcio Cementero del Sur, Gloria compró el 51% de las acciones de la cementera boliviana Soboce por 300 millones de dólares, y sumó en total el 98% de la participación en dicha compañía, la principal del país andino. En el mismo sector, en enero último firmó un convenio marco con la Unión Cementera Nacional de Ecuador para adquirir el 63% de las acciones por 230 millones de dólares. Sin embargo, en abril el Grupo cerró Ecolat en Uruguay, la segunda mayor empresa de lácteos, debido a una deuda de unos 35 millones de dólares que el grupo peruano consideró insostenible.

En Perú, el Grupo Gloria es propietario de 79.728 hectáreas de tierras para caña de azúcar y cría de ganado para la producción de leche, según un estudio de los investigadores franceses Jean Bourliaud y Michel Eresure, publicado en enero por la ONG peruana Cepes. El documento indica que ocupa el primer lugar entre las empresas agroindustriales peruanas con más de 2.500 hectáreas.