Especias y humo

Florentino Martínez, Florentino El Grande. Así habría que llamar a este hombretón capaz de convertir sus excelentes viñas en fuente de grandísimos vinos. Pocos conocen la viticultura alavesa como él. Tozudo, empeñado en progresar, este noble cosechero alavés de corazón euskaldun crea su propia bodega en 1991.

Luberri, el primer vino, una soberbia maceración carbónica renovada, se convierte en uno de los mejores, en dura pugna con su amigo / competidor Remírez de Ganuza y su R Punto. Luego llegan las crianzas y reservas de altos vuelos, de acuerdo con las uvas seleccionadas de las parcelas con las cepas más viejas, algunas con más de setenta años. El salto hacia la alta expresión, pero sin embriagarse de éxito, ni recurrir a los precios disparatados. Entremedias, este Bigas de Luberri 2007 que te engancha al primer trago. Consigue conjugar, con acierto y rara habilidad, el encanto "a primer sorbo" del vino joven, pletóricamente frutal, con la profundidad aromática y el gusto complejo que aporta el equilibrado paso por el roble. Y aúna carnosidad y finura, que es atributo fundamental de los buenos vinos riojanos. Finura que se aprecia en la oferta aromática de intensa frutosidad, perfectamente integrada en una atmósfera de especias, mineral y humo. Y carnosidad que se manifiesta en sus taninos maduros y en la sensación de plenitud que deja en la boca, pero sin abrumar. Para acabar recuperando la frutosidad como reclamo irresistible al nuevo trago. Que es la prueba de fuego de todo buen vino.