El futuro de Europa
Irlanda votó ayer no sólo con el corazón caliente, sino con la cabeza fría, y aprobó de manera arrolladora en referéndum otorgar un mandato a su Gobierno para que ratifique el Tratado de Lisboa. El voto favorable superó todas las expectativas y alcanzó el 67,1% en el conjunto del país, frente al 32,9% que votó no.
El apoyo de los irlandeses ayer a la ratificación del Tratado de Lisboa le ha dado la vuelta al voto contrario que emitieron en un primer referéndum en junio de 2008. Aquélla era la segunda vez que los irlandeses rechazaban en referéndum una propuesta de tratado europeo, como ya había ocurrido con el de Niza en 2001.
La abrumadora victoria del sí de los irlandeses al Tratado de Lisboa ha puesto fin a ocho años de incertidumbre institucional europea. La decisión de los irlandeses despeja el camino para una rápida entrada en vigor del también llamado Tratado de Reforma que posibilita un papel más ambicioso de Europa en la escena internacional, crea el puesto de un presidente estable y agiliza el funcionamiento de la UE.
Cientos de miles de italianos se echaron ayer a la calle para exigir libertad de prensa y rechazar los ataques de Silvio Berlusconi contra los medios críticos. "Somos todos farabutti [piratas, canallas]", cantaba la gente contestando a los recientes insultos dedicados por el primer ministro a los periodistas.
El director del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), el egipcio Mohamed el Baradei, llegó ayer a Teherán para coordinar con representantes iraníes la inspección a la planta de enriquecimiento de uranio que están construyendo en la provincia de Qom, según informaron medios estatales.
Tsunami verde (el color del Pasok) frente a colapso azul (el de Nueva Democracia). O, lo que es lo mismo, un cara a cara en las urnas entre los epígonos de las dos dinastías políticas más importantes de la Grecia contemporánea: de un lado, las promesas de cambio del socialista Yorgos Papandreu; al otro, el derrotismo apenas disimulado del derechista Kostas Karamanlis, primer ministro en funciones.
Mientras se ajusta la mascarilla que le tapa la nariz y la boca, Chych Primadasa muestra con la cara desencajada la lista de sus amigos muertos. Había 15; sólo se mantienen con vida dos, pero aún siguen enterrados bajo los escombros. "Estaban en clase de inglés.