Sólo habrá aborto sin plazo para fetos "incompatibles con la vida"

Catorce semanas de aborto libre. Dos indicaciones con un plazo más largo, de 22 semanas: grave riesgo para la salud de la madre y riesgo de malformaciones fetales. Y un último supuesto: que el feto que va a nacer sea "incompatible con la vida". En este caso, no habrá plazo máximo, para no obligar a la mujer a llevar a término un embarazo imposible. Estas son las líneas maestras del informe que ha preparado al Gobierno su comité de expertos y que avanzó ayer la ministra de Igualdad, Bibiana Aído. No hubo sorpresas. Los plazos que manejaba el Ejecutivo ya se conocían, aunque fuera extraoficialmente, y el resto de los aspectos coincide con el informe aprobado hace algunas semanas por el Comité de Igualdad del Congreso. La ministra Aído señaló ayer que el Gobierno espera tener el anteproyecto de ley listo antes del verano.

El comité de expertos recomienda también que las jóvenes mayores de 16 años puedan abortar sin necesidad de contar con la autorización de sus padres o tutores y que el aborto abandone el Código Penal. Aído aseguró que "en ningún caso" se castigará con prisión a la mujer que aborte fuera de los supuestos que prevea la nueva ley. Hay un aspecto que queda sin resolver con este informe, que exige que haya "incompatibilidad del feto con la vida" para que pueda practicarse el aborto en los casos de diagnósticos de anomalías fetales posteriores a las 22 semanas. Esto podría dejar fuera a casos en los que se detectan gravísimas malformaciones que permitirían vivir al feto -o al menos durante algún tiempo- pero que no son compatibles con una vida digna. Las mujeres españolas están acudiendo a Francia, donde el comité médico de un hospital público las evalúa, para abortar en estos casos.