Crisis económica mundial
El batacazo de los precios no cesa. En apenas cinco meses, la inflación ha pasado de ser la más alta en más de una década a la menor en 40 años, el 0,8%, según el dato adelantado. En principio, son buenas noticias para los hogares españoles. Pero el dato también tiene una cruz, pues alimenta un fantasma al que los economistas temen como al mismo diablo: la deflación.
La avalancha de cierres de empresas y expedientes de regulación está castigando duramente el empleo en Europa, pero de manera mucho más aguda en España. A finales del año pasado, el paro en España alcanzó el 14,4% de la población activa, prácticamente el doble que en la Eurozona, que fue del 7,4%, según los datos de Eurostat, la oficina estadística de la Unión.
El colapso de la vivienda, la escasez de crédito y la pérdida masiva de empleos en todos los sectores de la economía están forzando a los hogares en EE UU a replantearse la manera en la que gastan. Y esto provocó el desplome de la inversión empresarial y del consumo en el cuarto trimestre de 2008, que arrastraron a la economía hacia la mayor contracción desde el primer trimestre de 1982.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se reunirá el próximo lunes con los máximos responsables de las principales entidades financieras para debatir sobre las ayudas dadas a la banca y restablecer la actividad crediticia "que tanto necesita la economía", según anunció ayer la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega.
La Caixa se ha reforzado en el último año en sus principales compañías participadas, la mayoría de ellas agrupadas en Criteria, aprovechando que las acciones están baratas por la caída de las cotizaciones en que ha derivado la actual zozobra financiera, que se ha traducido en la evaporación de 11.007 millones de plusvalías latentes de la cartera de la caja de un año a otro.