Confebask reclama al tripartito más financiación y flexibilidad laboral

El tejido industrial vasco y sus trabajadores lo pueden pasar realmente mal el año próximo. La patronal Confebask presentó ayer el plan que había anunciado para hacer frente a la crisis, con una amplia batería de medidas que propone a los gobiernos central y vasco y a la UE y dos planteamientos clave en sus peticiones al tripartito: más flexibilidad y rapidez de la autoridad laboral al aceptar los expedientes de regulación de empleo y una mayor financiación pública y privada para afrontar con ciertas garantías la desaceleración económica de Euskadi.

La patronal detalló sus iniciativas en Bilbao con tono de preocupación, ante la constatación de que la situación se deteriora con rapidez. Unas 90 personas engrosan las listas del paro cada día. La economía vasca se ha frenado desde el 4,5% de crecimiento al inicio de 2007 al 2,6% en el segundo trimestre de este año (en tasa interanual) y el consumo privado ha caído en ese mismo periodo del 5,4% al 1,4%. Ambos siguen bajando. El crédito al sector privado ha sufrido un descenso tres puntos mayor en Euskadi que en el resto de España, pasando del 20% en el segundo trimestre de 2007 a un 6% en el segundo de 2008.

La patronal pide al Gobierno nuevas inversiones y ahorro del gasto público

Y la patronal cree que aún no ha llegado lo peor. El secretario general de Confebask, José Guillermo Zubia, advirtió de que 2009 puede ver la destrucción de empresas "perfectamente viables" por falta de liquidez si no hay una respuesta contundente del sector público y de las instituciones financieras que permita "restablecer la confianza" y alejar las incertidumbres.

Ante esa situación, la patronal instó al Departamento de Empleo para que trabaje en dos direcciones. Primero, que divulgue entre las empresas una cultura de mayor flexibilidad de jornada y horario que permita jugar con bolsas horarias para evitar los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE). Y, segundo, si esos expedientes son imprescindibles, piden a la consejería que las autorice con rapidez en vez de "mirarlas con lupa" como exigen los sindicatos. Además, plantea que en el caso de los ERE temporales, el Gobierno se implique en dar formación a esos trabajadores para salir reforzados de la crisis. "Invito a los trabajadores a un proceso de reflexión como el que ha habido en el mundo cooperativo", dijo Zubiaa, tras conocerse que en algunas firmas están congelando salarios y renunciando incluso a posiciones salariales.

Los empresarios reclaman igualmente al Ejecutivo para estimular la actividad económica que acelere las obras ya planificadas, apruebe de forma urgente nuevas inversiones públicas y ponga en marcha un plan de ahorro del gasto público "no productivo" todo ello para 2009 y 2010.

En el plan de medidas que se piden a la Administración central, Confebask quiere que la Seguridad Social reduzca en un plazo de tres años las cotizaciones empresariales hasta los niveles "medios de los países del euro", y que aplace los pagos a las firmas cuando éstas se lo soliciten "siempre que se comprometan a mantener el empleo". La patronal cree que la transferencia de las políticas activas de empleo ayudaría a reducir el paro.

Aunque Confebask no renuncia a una rebaja del Impuesto de Sociedades, no lo ha incluido en su plan. Sí solicita, sin embargo, la devolución del IVA con carácter general y una agilización de esa devolución a quienes tienen el derecho y el aplazamiento automático de la liquidación de IVA durante tres meses, previa solicitud. Aunque Zubia criticó que es un hecho la restricción crediticia, también pidió ayuda para las entidades financieras, al incorporar una petición al Gobierno vasco para que les compre activos y así aumentar su liquidez y capacidad de préstamo.