Los partidos ponen al Gobierno al borde de prorrogar los Presupuestos

La reunión terminó como empezó: con varios jarros de agua fría sobre los principios generales con los que el Gobierno trabaja para elaborar los Presupuestos Generales del Estado para 2009. Ningún grupo político se comprometió con el presidente José Luis Rodríguez Zapatero a apoyar las cuentas públicas para el próximo año, según constató él mismo a lo largo de la densa jornada en la que recibió en La Moncloa a ocho portavoces parlamentarios. Sólo queda para mañana el portavoz de ERC, Joan Ridao, cuya posición de partida también es distante. Así, en esta primera ronda no aparecieron los siete votos que el Grupo Socialista necesita para sumar a sus 169 y aprobar los Presupuestos. El fantasma de la devolución de los Presupuestos al Gobierno y, por tanto, la necesidad de prorrogar los Presupuestos actuales no es una quimera, según reconocieron varios de los portavoces que pasaron por el despacho presidencial. No obstante, la vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega, respondió sonriente con un sonoro "no", a si contemplaba la prórroga.

Pero la realidad de ayer fue ésta. Josep Antoni Duran Lleida, portavoz de CiU, proclamó: "No habrá Presupuestos Generales del Estado si no hay una nueva financiación para las comunidades autónomas". Se refería Duran tras dos horas de reunión, el mismo tiempo que estuvo el líder del PP, Mariano Rajoy, la pasada semana, a la financiación que debe tener Cataluña en función de lo aprobado en su Estatuto y cuyo modelo debía estar aprobado el 9 de agosto. Pero no estará. El presidente pidió "tiempo" a Duran para establecer el modelo de financiación. Tanto Durán como el portavoz de ICV, Joan Herrera, llamaron la atención sobre el "incumplimiento" de una ley, es decir, del Estatuto. El siguiente plazo será el 31 de diciembre, para que el nuevo modelo entre en vigor para 2009.

Propuestas de CiU

Aunque Duran vinculó su apoyo a los Presupuestos a lo que ocurra con la financiación catalana, sí ofreció políticas para paliar la crisis económica. Por ejemplo, una nueva rebaja del impuesto de sociedades. "El presidente no ha sido permeable a nuestras propuestas", reconoció. La reedición de una suerte de Pactos de la Moncloa, como los que hubo en los años 80, con los agentes sociales, tampoco fue aceptada.

No obstante, y aunque tenga otro nombre, este mediodía se verá al presidente junto a los líderes de UGT y CC OO, Cándido Méndez y José María Fidalgo, respectivamente; al presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, y de Cepyme, Jesús Bárcena, firmar en La Moncloa un documento con un listado de medidas para juntos hacer frente a la crisis. En la reunión de los portavoces, el presidente se mostró convencido de que la crisis cederá en el segundo semestre de 2009.

Pero las reticencias se sitúan en este momento y en los grupos parlamentarios que son a quienes corresponde aprobar los Presupuestos. Lo dejaron patente el portavoz del PNV, Josu Erkoreka; de IU, Gaspar Llamazares; de ICV, Joan Herrera; del BNG, Francisco Jorquera; de Coalición Canaria, Ana Oramas; de UPyD, Rosa Díez, y de NaBai, Uxue Barkos. La vicepresidenta, no obstante, no tira la toalla y expresó al acabar la ronda, poco antes de las diez de la noche, que el acuerdo aún es posible y pidió un esfuerzo por separar los Presupuestos de la financiación autonómica.