Los técnicos de Hacienda critican el "coladero" de Aduanas

La crisis del aceite de girasol pringa también la gestión aduanera. Ayer, el sindicato de técnicos del Ministerio de Economía y Hacienda (Gestha) aseguró que no se hicieron los suficientes controles en las aduanas para detectar irregularidades en el aceite de girasol contaminado procedente de Ucrania. La Agencia Tributaria -que tiene adscrito Aduanas- desmintió la información de Gestha y aseguró que el aceite sí pasó todos los controles necesarios. La Agencia declaró, además, que se reserva emprender acciones legales contra el sindicato por sus acusaciones.

Los técnicos critican que los controles físicos aduaneros a los que se sometieron las partidas de aceite de girasol contaminado se realizaron mediante escáner. "Habría que haberlos analizado en un laboratorio, como se hizo en otros países como Francia o Italia", declaró ayer José María Molinedo, secretario general de Gestha. Este sindicato asegura que desde enero hasta la fecha en que fue detectado el aceite de girasol llegaron a las aduanas españolas una veintena de partidas de aceite de girasol procedentes de Ucrania, unas 53.000 toneladas. "De éstas sólo una pasó teóricamente el control físico que exige la ley europea y que debería haber ido más allá que un simple control por escáner", según Molinedo.

La Agencia Tributaria asegura que el aceite de girasol contaminado es un producto "a granel" y por tanto no precisa un certificado sanitario porque no es apto para el consumo humano hasta después de su refinado. "Los controles de estos productos se realizan para ver si son en realidad lo que dicen ser, por motivos arancelarios", aseguró ayer un portavoz de la Agencia que declaró que en Aduanas se han hecho hasta 37 análisis de este tipo. "Los controles sanitarios tienen que hacerse cuando el aceite ya ha sido refinado. Si hubiera necesitado un certificado sanitario en su paso por Aduanas y no lo hubiera tenido, habría sido inmovilizado hasta tenerlo", aseguran.

"Las aduanas españolas son un auténtico coladero. Ya lo hemos visto con otros productos como los dentífricos", criticó Molinedo, que exigió más controles.