Hollywood frente a Hollywood, en Internet

Una mujer con aires de Dorothy Parker sorbe un whisky agarrada a un teléfono de los años treinta. Mientras, acusa a Jack Warner, uno de los fundadores de los estudios Warner Brothers, de haberse olvidado de que los guionistas eran su principal aliado. "Les vas a chupar la sangre y, si tienen suerte, les lloverán algunos centavos. Antes no eras así". Al otro lado del hilo telefónico, un ejecutivo de unos grandes estudios escucha perplejo: "¿Por qué me llamas, Jack? ¿Y por qué hablas tan raro?". La aparición de otra mujer al teléfono, vestida con ropa actual y preguntando sobre la huelga de guionistas, desvela que el ejecutivo ha sido traicionado por los fantasmas del pasado y un extraño cruce de líneas le ha enredado en una conversación que, pese a tener varias décadas, sonaba inquietantemente actual.

Jennifer Jason Leigh, Brian Cox y Nicole Ansari son los protagonistas de este cortometraje incluido en el proyecto SpeechlessWithoutWriters.com (Sin guionistas, mudos), creado por los guionistas en huelga que desde hace siete semanas paralizan Hollywood reclamando una parte de los beneficios que su trabajo genera en Internet. Ninguno de los tres cobró por un rodaje organizado el pasado jueves en Nueva York en los estudios Bravo, cedidos de forma gratuita para el proyecto, como tampoco cobraron los técnicos que grabaron el filme a las órdenes de George Hickenlooper. Este veterano director y guionista, autor entre otras de Factory girl, concibió Speechless... al verse rodeado de artistas sosteniendo pancartas en una de las primeras manifestaciones de la huelga. "El guionista Alan Sereboff y yo pensamos: 'Tiene que haber una forma de llegar al público que no sea estar aquí sujetando pancartas con aires marxistas", recuerda Hickenlooper con sorna.

Y como los guionistas ponen las palabras pero no tienen rostro popular, les pidieron a las grandes estrellas de Hollywood que prestaran su talento a un proyecto de cortos relámpago en los que, con mucho humor y sin casi presupuesto, se subrayara la importancia que tiene un escritor en la cadena de producción cinematográfica. En apenas tres semanas, Hickenlooper y Sereboff han conseguido que desde Woody Allen hasta Sean Penn protagonicen una veintena de piezas sagaces y cómicas. "Los actores vamos a ser los siguientes en las negociaciones por los beneficios en Internet. Nos interesa que los guionistas ganen su batalla", subrayaba Brian Cox.

Hickenlooper vaticina: "Con Speechless... hemos demostrado que podemos hacer buenos contenidos online con actores de primera fila. Estamos listos para prescindir de los estudios". Dicho y hecho. Ayer se supo que ya hay grupos de guionistas buscando financiación para crear productoras independientes online al margen de la industria. Y otros negociando directamente sus contratos individuales con cada programa.