_
_
_
_
Reportaje:

La burbuja del arte se desinfla

Pese a las ventas millonarias, el mercado muestra síntomas de fatiga debido a la crisis financiera en EE UU

El mercado del arte moderno contiene el aliento tras la desmedida euforia de los últimos años y muy concretamente de 2006. Las subastas de esta semana en Nueva York han sido el primer test real de la situación tras la crisis hipotecaria que explotó en agosto y que afecta a los bancos de EEUU y a buena parte de la comunidad inversora.

Los resultados, espectaculares en Christie's -con ventas de 272 millones de euros- y comedidos en Sotheby's, -se conformó con 183 de los 250 millones de euros que había estimado y ayer registró una fuerte bajada en Bolsa- lanzan una imagen contradictoria sobre el estado de salud de un mercado del que hasta ahora nadie creía que pudiera tocar techo.

Pero no será hasta la próxima semana, cuando se celebren las subastas de arte contemporáneo, cuando marchantes y galeristas puedan valorar si la crisis ha llegado al mundo de los lienzos. La caída del dólar, que esta semana ha alcanzado su mínimo histórico frente al euro -un euro, 1,46 dólares-, sigue siendo muy suculenta para los millonarios de nuevo cuño. Compradores en su mayoría asiáticos y rusos que son los responsables, junto a jóvenes emprendedores del boom de Internet, del auge que han experimentado las ventas de artistas posteriores a la II Guerra Mundial. Rothko, Warhol, Jeff Koons o Damien Hirst son los ejemplos más claros. Sus precios, en muchos casos, se han multiplicado por cinco en tres años.

"Los americanos compraban gainsbouroughs en 1910, la nueva economía compra bacons y rothkos en 2010", aseguraba recientemente Tobias Meyer, responsable de arte contemporáneo de Sotheby's. Pero los coleccionistas jóvenes americanos, procedentes en muchos casos de la inversión en fondos de alto riesgo, sí que se resienten tanto con la caída del dólar como con las inversiones fracasadas en hipotecas basura. Por lo tanto, lo que hagan la próxima semana será decisivo para valorar la situación.

No obstante, las casas de subastas se declaraban optimistas tras los resultados de esta semana. Christie's alcanzó su segundo mejor récord colectivo en ventas de arte moderno, sólo 55 millones de euros inferior a su cifra histórica de 2006, cuando la firma acumuló 340 millones de golpe. Sotheby's, en cambio, no conseguía vender 20 de sus 76 lotes. Entre las víctimas de esa subasta estaba el cuadro de Van Gogh Los campos de trigo, por el que nadie quiso ofrecer ni los 17 millones de partida pese a ser considerado por los expertos como uno de los últimos que pintó antes de su suicidio en Auvers-sur-Oise.

"Hay una explicación para cada una de las piezas no vendidas. No está relacionado con un punto de inflexión en los mercados, sino con precios agresivos y material nada espectacular", comentaba el marchante Andrew Fabricant en The New York Times. Para el vicepresidente ejecutivo de Sotheby's, lo ocurrido se explicaba así: "El mercado ha respondido a propiedades atractivas e históricamente importantes y cuya estimación era acorde con las expectativas y se ha resistido a propiedades que no cumplen esos criterios".

No obstante, fue Sotheby's quien vendió el cuadro estrella de la semana, Te poipoi (La mañana), un paisaje tahitiano de Paul Gauguin, adquirido por 26,6 millones por el hongkonés Joseph Lau. Al ser el único que pujó por la obra consiguió quedársela por menos de 28 millones, el mínimo que Sotheby's había previsto. Conseguía así un cuadro con mucho pedigrí, puesto que La mañana había permanecido en manos de la misma familia durante 62 años. Y no precisamente de cualquiera. Fue adquirido en 1945 por Joan Whitney Payson, miembro de uno de los clanes de la realeza económica estadounidense, los Whitney, responsables entre otras cosas de la creación del Whitney Museum of Modern Art. Joan Whitney, primera propietaria del equipo de béisbol New York Mets, acumuló a lo largo de su vida obras emblemáticas que, junto a las de su hermano John Hey Whitney, han inundado el mercado tras su muerte: ellos también eran propietarios del famoso Muchacho con pipa (1905) de Picasso, que hizo historia en 2004 al ser vendido por 70 millones de euros, batiendo todos los récords, que ya se han superado dos veces.

Una veintena de artistas multiplicó sus precios en las subastas de esta semana. La obra de Matisse La odalisca, armonía en azul se vendió en Christie's por 23,2 millones de euros, casi 10 más que su récord anterior. Las cuatro estaciones de Pissarro alcanzaba los 10 millones de euros y una cabeza de bronce de Picasso, Cabeza de mujer (Dora Maar), batía el récord de escultura del artista en Sotheby's tras una puja que se saldó con 17,7 millones de euros, desembolsados por un estadounidense anónimo.

Arriba, <i>La mañana</i>, de Gauguin, y abajo, <i>Los campos de trigo</i>, de Van Gogh, subastados en Nueva York.
Arriba, La mañana, de Gauguin, y abajo, Los campos de trigo, de Van Gogh, subastados en Nueva York.

LAS CIFRAS

- La odalisca, armonía en azul (1937), de Matisse. Vendido en Christie's por 23,2 millones de euros.

- Las cuatro estaciones (1872), de Camille Pissarro. La misma casa de subastas ha logrado 10 millones de euros por el cuadro.

- Cabeza de mujer (Dora Maar), de Picasso, se ha adjudicado en Sotheby's por 14 millones de euros.

- La mañana, de Paul Gauguin. La venta más jugosa de las subastas de esta semana: 27 millones de euros.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_