Francia hace ley la prueba de ADN a los inmigrantes
El Parlamento francés aprobó finalmente la ley del control de la inmigración, incluido el polémico artículo que contempla la realización, siempre voluntaria, de pruebas de ADN para quienes pretenden beneficiarse del reagrupamiento familiar y encuentren problemas para probar su filiación por medios documentales. Según el texto final, esta medida será experimentada durante un año antes de ser o no incluida definitivamente en la ley.
Prueba de la división que ha generado el texto es el rechazo que ha provocado incluso en las filas de la derecha gubernamental. Los diputados de la Asamblea Nacional la adoptaron por 282 votos a favor, 235 en contra y 33 abstenciones. Cuatro diputados de la Unión por un Movimiento Popular (UMP) votaron en contra, y 21 optaron por abstenerse. En el Senado, 158 senadores votaron a favor y 136 en contra. La izquierda votó en masa contra el proyecto. El Partido Socialista ya ha anunciado que recurrirá la ley ante el Tribunal Constitucional.
La medida, introducida en una enmienda por el diputado de la UMP Thierry Mariani, choca abiertamente, según sus detractores, con la legislación vigente; concretamente, con el artículo 16 del Código Civil, que establece que "el estudio genético de las características de una persona no puede llevarse a cabo más que con fines médicos o de investigación científica".
La ex ministra Simone Veil, miembro del Consejo Constitucional y que apoyó al candidato Nicolas Sarkozy en las pasadas elecciones, ha declarado públicamente que se opone a las pruebas de ADN "por principio".
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