Montilla exige a las empresas "una revisión a fondo" de la red eléctrica en Cataluña

Un apretón de tuercas. La Generalitat tiene hoy una reunión con los responsables de Red Eléctrica Española (REE) y Endesa a la que asistirá el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu. El presidente catalán, José Montilla, exigió ayer una "revisión a fondo" de la red en Cataluña, y las Administraciones reclamarán hoy a las eléctricas que aceleren las inversiones. En Barcelona, los dos convenios firmados con Endesa se han demostrado insuficientes, como ahora reconoce el Ayuntamiento. El Gobierno catalán, con competencias en inspección y sanción, ha cobrado 1,4 millones en multas a Endesa desde 2004.

Las sanciones son el resultado de expedientes informativos abiertos por la Generalitat, que tiene competencias en la red de distribución para inspeccionarlas y multarlas por deficiencias en las instalaciones y el servicio. Fuentes de la Generalitat no pudieron precisar ayer ni el número de inspectores que destina a este cometido ni los expedientes abiertos, con lo que resulta difícil determinar la intensidad y el rigor con que ha ejercido esta labor, más allá de las sanciones cobradas: 636.239 euros en 2004, 210.000 euros en 2005, 328.986 en 2006 y 254.500 en 2007. Los 2,2 millones que espera cobrar en breve corresponden a la multa inicial de 6 millones impuesta por el gran apagón de diciembre de 2001 y que los tribunales han rebajado. Todas corresponden a distribución, es decir, a Endesa, según fuentes del Gobierno catalán.

Precisamente, esta compañía ha firmado varios convenios comprometiéndose a inversiones en la red de Cataluña desde 2001, pero la Generalitat comenzó a verlos con recelo en 2004. Ese año, encargó una auditoría externa para valorar si el plan de inversiones de la eléctrica para el periodo 2004-2006, de 1.700 millones, era suficiente para garantizar el aumento del consumo. Ahora, tras el apagón, la Generalitat ha decidido ocultar los resultados de ese estudio. "La auditoría se va a incluir en el expediente informativo y por eso no se va a hacer pública", señalaron ayer fuentes del departamento de Economía, del que depende Energía.

Cuarto día sin luz

Aunque la auditoria se oculte, la fragilidad del sistema ha quedado a la luz con el apagón del lunes, que afectó a 350.000 abonados y que todavía ayer mantenía a oscuras algunos puntos. "Algunas decenas", según Fecsa-Endesa. Pese a que la luz ya ha regresado a la mayoría de viviendas y oficinas, la sensación de enfado permanece. En comercios y negocios era ayer más patente la irritación. Josep Vilaseca, propietario de un restaurante que ha estado cerrado tres días, decía que lo más indignante "ha sido la falta de información y las mentiras una tras otra". Ayer, unos centenares de ciudadanos volvieron a expresar su indignación manifestándose en la plaza de Sant Jaume.

Los 134 grupos electrógenos son el precario sistema de energía de muchos clientes de las eléctricas. Mientras, se cava a gran velocidad una larga zanja por la ciudad para llevar el suministro por cable de una subestación a otra más afectada, la que ardió en el paseo de Maragall,

El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, insistió ayer en que hay que revisar a fondo el plan de actuaciones e inversiones de Fecsa-Endesa. El Ayuntamiento y la eléctrica han suscrito dos convenios. Uno en el 2002, con horizonte en 2010, y con una inversión prevista de 270 millones de euros. Este convenio preveía la construcción de seis subestaciones urbanas. En 2005, las dos partes suscribieron un acuerdo para completar aquel convenio y con plazo hasta 2015. El complemento suponía añadir otras tres subestaciones y una inversión total de 178 millones de euros. Hasta ahora sólo hay tres construidas, tres en construcción y para las tres restantes no se ha designado ubicación. Fuentes municipales señalaron ayer que después de lo ocurrido está claro que aquellos convenios "son insuficientes".

Por parte de la Generalitat, el presidente del Ejecutivo, José Montilla, pedirá una revisión a fondo de la red eléctrica en Cataluña.