El hijo de Gaddafi sugiere que Libia liberará pronto a las enfermeras de Bulgaria

Seif al Islam, uno de los hijos del líder libio Muammar el Gaddafi, declaró ayer que el caso de las cinco enfermeras búlgaras y el médico palestino encarcelados en Libia desde hace más de ocho años había entrado en la "recta final", según la agencia de prensa libia Jana. "La solución será positiva y esperamos que será el principio del fin de este caso", recalcó el que dirige también la fundación caritativa de los Gaddafi.

Su declaración se produjo justo después de entrevistarse en Trípoli con una delegación de la Unión Europea encabezada por el ministro alemán de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, y la comisaria europea de Relaciones Exteriores, Benita Ferrero-Waldner. También el presidente de EE UU, George W. Bush, pidió ayer desde Bulgaria la liberación de las enfermeras.

Las enfermeras y el médico fueron condenados a muerte por haber inoculado supuestamente el virus del sida a 438 niños de un hospital de Bengazi, de los que 56 fallecieron. Ante el tribunal afirmaron que los niños estaban ya contaminados antes de que el equipo extranjero llegase al centro médico.

Antes de viajar a Trípoli, la delegación se desplazó a Bengazi donde se reunió con los representantes de las familias, a los que ofrecieron tratamiento gratuito contra la enfermedad. Las familias reivindican también indemnizaciones y la fundación que encabeza Seif al Islam exige que la UE construya en Bengazi un centro de investigación contra el sida.

La prensa británica barajó la hipótesis de que Londres podría entregar a Trípoli al terrorista libio Abdelbaset Ali Mohamed al Megrahi, condenado por volar en 1988 un avión de EE UU, para que cumpla su condena en Libia. A cambio, las enfermeras serían enviadas a Bulgaria. El Foreign Office lo ha desmentido.