Los héroes de la Filmoteca Afgana

El fanatismo, desde Hitler hasta Pol Pot, siempre ve en la cultura un peligroso enemigo. Si además se alía con la ignorancia, acaba cometiendo crímenes contra la civilización como la destrucción de los budas del valle de Bamiyán, en Afganistán, dinamitados por orden del régimen talibán en 2001. El mismo que cerró las escuelas y prohibió escuchar música... hasta el canto de los pájaros.

También ordenó a Sayed, director de la Filmoteca Afgana, que quemara todo el archivo cinematográfico del país. La orden se cumplió sólo en parte, puesto que Sayed decidió asumir el riesgo e intentar preservar el legado visual. El valenciano Ricardo Macián, corresponsal de Canal 9, cubrió la noticia de la destrucción de uno de los lotes de películas. Más tarde, decidió contar la heroica resistencia de los nueve trabajadores de la Filmoteca Afgana, que desafiaron la orden de los talibanes y escondieron rollos de películas detrás de techos y tabiques falsos. "Han salvado la historia fílmica del país", señaló ayer Macián tras la presentación del documental en Málaga.

Recuerda que los talibanes aún están activos en la frontera con Pakistán, sobre todo en el suroeste del país. "Si vuelven al poder, los trabajadores de la filmoteca tendrán que irse". Los ojos de Ariana (nombre de la antigua Afganistán, tierra de los arios) es un documental con estructura de largometraje, con un guión elaborado por Macián y Carlos Muguiro. Macián viajó a Afganistán en 2004 para preparar el rodaje, que se realizó dos años después en 20 días y con un presupuesto de unos 350.000 euros.

La filmación estuvo sujeta al ritmo que obliga la frágil seguridad en el país. De hecho, algunas escenas del documental se rodaron en la aldea de Bagram, en la región de Parwan, donde el vicepresidente de EE UU, Dick Cheney, salió ileso de un atentado hace unas semanas. El equipo también viajó por carretera a Bamiyán. "La Embajada de España nos previno de que no lo hiciéramos porque no podían asumir esa responsabilidad", señaló ayer Rubén Guillem, productor de la cinta.

La película incluye las imágenes inéditas de la ejecución de Mohamed Najibulá, último presidente comunista de Afganistán, filmadas por Sayed en 1996 y que fueron reveladas tras la caída de los talibanes. Macián también contó ayer que el autor del vídeo de la voladura de los budas fue el equipo de Al Yazira del periodista Taysir Alony, que fue encarcelado en España -ahora disfruta de prisión atenuada- por su vinculación con Al Qaeda.