La economía catalana toma nuevos bríos y crece el 3,6%

La situación de la economía catalana es "francamente buena". Así la describió ayer el consejero de Economía y Finanzas, Antoni Castells, tras anunciar el crecimiento registrado por la comunidad catalana en el segundo trimestre de este año. Éste fue de un 3,6%, el mismo ritmo que el alcanzado de enero a marzo, y denota una bonanza no experimentada en los últimos 23 trimestres.

La previsión para el conjunto del año, que se situaba en el 3,3%, deberá ser revisada al alza, avanzó el consejero durante la presentación de la Memoria económica de Cataluña 2005, editada por la Cámara de Comercio de Barcelona. El año pasado, la economía creció el 3,3%.

En el mismo acto, el presidente de la cámara, Miquel Valls, recogió el guante y alabó la "tendencia expansiva" de la economía. Sin embargo, añadió, el ritmo de crecimiento catalán podría estar muy por encima del actual -se situaría en un 5,6%- si Cataluña lograra superar el déficit comercial exterior, que mide la diferencia entre lo que se importa y lo que se exporta.

"Si no contribuimos todos a superar los problemas de competitividad, las bases de nuestro crecimiento pueden agotarse", admitió Antoni Castells a este respecto.

El consejero de Economía explicó que se está produciendo cierta recomposición de las bases del crecimiento y una menor dependencia del sector de la construcción. Es decir, la economía catalana recupera un "patrón más sano" de crecimiendo.

La demanda interna se ha moderado (en el segundo trimestre, creció el 4,6% frente al 5,5% registrado de enero a marzo) y, en paralelo, se percibe una mejora del sector exterior. Las exportaciones de bienes y servicios crecen el 10,8%, 1,8 puntos porcentuales más que en el primer trimestre y muy por encima del crecimiento que presentaron en 2005 (3,5%).

La reactivación de las economías de la zona euro, con un crecimiento del 2,6%, tiene un efecto positivo para el sector, ya que el 75% de las ventas al exterior de las empresas catalanas se dirigen a la Europa comunitaria. El buen comportamiento del sector exterior también se deja notar en el producto interior bruto (PIB) industrial, que mantiene el tono expansivo recuperado este año y que creció el 1,3% en el segundo trimestre de 2006.