"La referencia a Zaplana no es verdad"

El empresario Antonio Moreno Carpio, cuyas sociedades endosaban fondos procedentes de operaciones inexistentes a Desarrollo Gran Vía, SL, una empresa vinculada a familiares suyos que actuaba como "recaudador", según la Agencia Tributaria, en la trama de facturas falsas en la que se distrajeron al menos 10 millones de euros de Terra Mítica, se desdijo ayer de las conversaciones mantenidas con los diputados socialistas José Camarasa y Antoni Such. En éstas se detallaba cómo se hinchaban las facturas en el parque temático y relacionaba a Eduardo Zaplana con el supuesto cobro de comisiones ilegales.

En declaraciones ayer a El Mundo, Moreno Carpio, imputado en el caso Terra Mítica por supuesto delito fiscal, afirma que Camarasa le ofreció -escrito en un papel- 1,8 millones de euros y apoyo ante la fiscalía y la Agencia Tributaria si inculpaba a Zaplana. El empresario acusa ahora a los socialistas de manipular sus conversaciones y niega la relación de Zaplana con la trama. "La referencia a Zaplana no es verdad, les decía lo que ellos querían oír para que me ayudaran", afirma Moreno.

El empresario, que llegó a acumular a través de sus sociedades y junto a las de los empresarios Vicente Conesa y Francisco Escoto facturas falsas por más de ocho millones de euros por trabajos no realizados en el parque, afirma incluso que los datos que aparecían en las cintas "son inducidos". "Me repetían las cifras para que las repitiera y poder grabarlas", alega. Antonio La Torre, abogado del empresario, apuntó ayer que su cliente prepara una querella contra Camarasa y Such e insistió en que el caso "está muy politizado". Los socialistas valencianos anunciaron ayer acciones judiciales contra Moreno Carpio por "injurias y calumnias".