La crisis de la integración latinoamericana devalúa la cumbre con la Unión Europea

La crisis en las organizaciones de integración regional latinoamericanas inducida por los cambios de alianza del venezolano Hugo Chávez, con su ascendiente sobre el boliviano Evo Morales, tuvieron hasta el último minuto al borde del fracaso a la cumbre de Viena. La cuarta cumbre entre la Unión Europea y los países de Latinoamérica y el Caribe, una colección de unos 60 países que acogen a más de 1.000 millones de personas y contribuyen a una cuarta parte del PIB mundial, concluyó ayer en Viena con un éxito cogido con alfileres.

Sólo a última hora y tras intenso forcejeo se consiguió pactar el inicio de negociaciones con la Comunidad Andina de Naciones (CAN) a partir de hoy mismo. Pero el presidente peruano, Alejandro Toledo, dudaba anoche de que el boliviano Evo Morales acudiera hoy a la cita convocada.Una fuente de la delegación boliviana en Viena aseguraba que Morales sólo estará presente "brevemente, para despedirse".

En la Declaración de Viena se recogen acuerdos en distintos campos: condenas contra el terrorismo, compromisos de abordar de forma global e integrada el problema de la droga, colaborar más estrechamente en energía, combatir la pobreza, estrategias conjuntas para la emigración, establecimiento de relaciones entre el Parlamento Europeo con los de la región, entre otros.

En la Declaración también se abordan las relaciones de asociación y de comercio con tres bloques latinoamericanos. Con Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, afectados por el conflicto interno entre Buenos Aires y Montevideo por las papeleras uruguayas) se da "mandato a los negociadores para que intensifiquen sus esfuerzos con el fin de avanzar en el proceso de negociación". Es un impulso político supeditado a la más amplia negociación para un acuerdo universal en el seno de la Organización Mundial de Comercio. Con los países centroamericanos se decide "entablar negociaciones relativas a un acuerdo de asociación", que junto al comercio incluye diálogo político y cooperación.

Acuerdo de asociación

Finalmente, los reunidos en Viena celebraron "la decisión adoptada por la UE y la Comunidad Andina de entablar, durante 2006, un proceso conducente a la negociación de un acuerdo de Asociación (...); a estos efectos, la CAN y la UE acuerdan celebrar todas las reuniones necesarias antes del 20 de julio".

Chávez, que acaba de sumarse al Mercosur y de abandonar la CAN (ahora Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú) en protesta por la decisión de Bogotá y Lima de suscribir el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, dijo ayer: "La CAN no sirve, fue destrozada con la firma de los TLC por Colombia y Perú. Se acabó la Comunidad Andina". Toledo, el presidente peruano, estuvo hasta el último momento luchando porque la UE tendiera la mano a la CAN y finalmente logró lo que buscaba. En el plenario de clausura, Toledo se acercó a Morales y le abrazó. A Chávez, que optó por ahorrarse los discursos oficiales y abandonó a sus homólogos para asistir a un acto de los alternativos, dijo que le enviaba "un abrazo integrador".

En la conferencia de prensa final de la cumbre se presentó este acuerdo como un éxito, por haberse logrado detener el desmembramiento de la CAN. "Espero que Venezuela regrese", insistió Toledo, mientras José Manuel Durão Barroso, presidente de la Comisión, insistía en que "la integración ofrece grandes ventajas al desarrollo y los países pequeños y medianos la necesitan para ofrecer una dimensión de mercado a la UE".

Pero ajeno a las florituras diplomáticas Morales calificó de "payasada" el abrazo de Toledo. "Son actitudes de figuración de los que no entienden la lucha de los pueblos", machacó. A Toledo se le planteó la cuestión de si respuesta tan desabrida podría reflejar la frustración de Morales con el hecho de haber aceptado acudir a la cita de hoy entre la CAN y la UE. "Hay testigos de que se ha comprometido a venir. Yo tengo que creer en su palabra. Si nos ha engañado, eso sería muy serio. Si Bolivia decide no asistir tenemos el acuerdo de seguir negociando los tres presidentes

[de Colombia, Ecuador y Perú] con la UE". Un portavoz de Morales aseguró que el presidente boliviano acudirá esta mañana a la cita pero sólo "brevemente, para despedirse".

A quien sí dedicará tiempo Morales es a Lula da Silva, el presidente de Brasil, con quien hablará de la nacionalización de los activos de Petrobras, empresa contra la que el boliviano arremetió duramente el día anterior. Chirac se cuenta entre las personas deslumbradas por Morales en Viena. "Es un hombre muy respetable, porque es presidente, pero sobre todo porque es un hombre que ha devuelto su honor a la población mayoritaria de su país, muy mayoritaria, que lo había perdido un poco desde hace cuatro o cinco siglos", dijo.

[El conflicto de las papeleras entre Argentina y Uruguay irrumpió ayer también en la cumbre encarnado en una reina del carnaval argentino con conciencia ecológica que, en bikini, logró acaparar la atención de la prensa y de los 60 jefes de Estado y Gobierno mientras posaban en Viena para su foto de familia, informa Efe. En el acto reivindicativo, en presencia de decenas de cámaras e informadores, la argentina Evangelina Carrozzo, de 26 años, apareció con botas altas y un escueto bikini negro de lentejuelas, levantando los brazos con un cartel en dirección a los atónitos líderes en el que se leía "Basta de papeleras contaminantes. Greenpeace".]