La Cámara rechaza la gratuidad de la operación de cambio de sexo

El Parlamento rechazó ayer incluir entre las prestaciones de la sanidad pública la gratuidad de las operaciones de reasignación de sexo. La propuesta partió del PSE, que se quedó sólo en la defensa de la iniciativa. El tripartito, EHAK y los populares votaron en contra por diferentes motivos. Pese a este rechazo, el tripartito dejó la puerta abierta a incorporar dicha prestación a medio plazo.

La Comisión de Sanidad de la Cámara volvió a debatir sobre una cuestión que se ha convertido en recurrente en los últimos años. Como en las anteriores ocasiones, la propuesta socialista no encontró ningún apoyo de los demás partidos. La socialista Coral Rodríguez argumentó que el cambio de sexo es una cuestión vital para las personas que sufren un trastorno de identidad y que, en muchos casos, no pueden sufragar esa intervención con sus medios.

El catálogo de prestaciones sanitarias del Sistema Nacional de Salud no incluye actualmente esas operaciones. Pese a ello, algunas comunidades sí financian las intervenciones, como Andalucía y Extremadura.

En el caso de Euskadi, Osakidetza ofrece un tratamiento hormonal, pero si los pacientes desean ser intervenidos se les informa de que no pueden hacerlo en los hospitales públicos y se les indican las opciones existentes que, básicamente, pasan por una operación en un hospital privado. En estos momentos, un total de 36 personas están siguiendo el tratamiento hormonal. Además, Asuntos Sociales cuenta con una partida de 60.000 euros para ayudar económicamente a las personas que desean pasar por el quirófano.

Actitud "prudente"

En su discurso, Rodríguez defendió que el Gobierno vasco tiene competencias para incorporar al catálogo de prestaciones autonómico este tipo de operaciones y recalcó que eso no iría en "detrimento" de la atención a otras necesidades.

El tripartito rechazó la propuesta con el argumento de que la sanidad pública tiene otras prioridades. Oskar Matute, de Ezker Batua, reconoció el derecho del colectivo de afectados a ser operados de forma gratuita por la sanidad pública, pero apuntó que mientras no figure en el catálogo de prestaciones, las soluciones que se están ofreciendo en Euskadi "no son malas". Para Karmele Antxustegi, de EA, el catálogo debe ser un documento abierto por lo que, "tal vez a medio plazo se pueda llevar a cabo estas operaciones en la sanidad pública". La peneuvista Estíbaliz Hernáez destacó que la sanidad pública vasca se ajusta a las necesidades de la población y, por lo tanto, debe mantener una actitud "prudente" a la hora de incluir nuevas prestaciones. "La sanidad vasca ha sido pionera en nuevos tratamientos y si estas operaciones no se incluyen en el catálogo será porque aún hay que estudiar algunos aspectos".

Desde EHAK, Nekane Erauskin abogó por una reforma del catálogo de prestaciones vascos sin tener que depender de lo que se decida a nieval español. Carmelo Barrio, del PP, recomendó al PSE que pida al Ministerio de Sanidad que recoja esas operaciones en su catálogo antes de reclamarlas sólo para Euskadi.