Las faldas del hombre

Una exposición y un libro exploran el pasado y el futuro de esta prenda en el vestuario masculino. Un recorrido por la historia, la cultura y las tradiciones que no está reñido con una firme apuesta por el diseño español contemporáneo: en la muestra participan 40 creadores nacionales.

Veinte años después de que Miguel Bosé apareciera en la portada de un disco con una falda de Francis Montesinos, el cantante Robbie Williams actúa en directo con una sugerente faldita escocesa, una prenda que siempre fascinó a uno de los más fervientes defensores de la falda masculina: el diseñador francés Jean Paul Gaultier. Mantiles circulares, delantales, caftanes, túnicas, sotanas, chilabas, pareos étnicos o el kilt escocés. Aunque son pocos los hombres que hoy se atreven a pasearse por la calle en falda -exceptuando, eso sí, a los curas, el príncipe Carlos de Inglaterra y el artista Julian Schnabel-, la prenda, utilizada durante siglos indistintamente por hombres y mujeres, parece salir definitivamente del armario femenino para romper el tabú.

La exposición Hombresenfalda, que se inaugura en la Casa de Vacas del parque del Retiro de Madrid el 9 de febrero y permanecerá hasta el 2 de marzo, pretende recoger el pasado y el futuro de una tendencia deudora de culturas como la egipcia, sumeria, griega o romana. El crítico de moda y danza Roger Salas, comisario de la muestra, explica que la exposición de Madrid nació de dos experiencias internacionales previas. En 2002, el Victoria & Albert Museum de Londres inauguraba Men in skirts (Hombres en faldas). Un año después, el Metropolitan Museum de Nueva York abría las puertas de Bravehearts: Men in skirts. El comisario y responsable de ambas, el historiador de moda Andrew Bolton, ha colaborado con los impulsores de la exposición que ahora llega a España. Escribe Bolton: "La vestidura militar de los romanos (y de los griegos y los etruscos antes que ellos) hizo mucho para promocionar la pierna como uno de los atractivos para la ostentación de la fuerza varonil, el atletismo e incluso la proeza sexual. Faldas, y particularmente aquellas que descubrían una gran proporción de la pierna masculina, permitían a quienes la llevaban hacer gala de su virilidad y masculinidad".

"En la muestra de Madrid (…) hemos querido potenciar el diseño español contemporáneo por encima de otras consideraciones antropológicas o históricas; incentivar a los creadores a participar desde su inventiva y libertad expresiva", señala Roger Salas. En Hombresenfalda participan 40 diseñadores nacionales: Ailanto, Amaya Arzuaga, Custo Barcelona, David Delfín, Adolfo Domínguez, Duyos, Loewe, Antonio Miró, Montesinos, Jesús del Pozo, Ángel Schlesser o Roberto Torretta, entre otros.

La exposición cuenta con 75 piezas, entre las que también se pueden encontrar creadores internacionales. Giorgio Armani, Roberto Cavalli, Comme des Garçons, Jean Paul Gaultier, John Galliano o Vivienne Westwood son algunos de ellos. El recorrido se completa con una sección dedicada a las faldas en la danza con piezas utilizadas por Nacho Duato o Joaquín Cortés. "La falda masculina ha pervivido en la danza como un elemento casi mágico ligado al virtuosismo y a la poesía misma del baile", explica Salas. El proyecto también se plasma en un libro de 250 páginas que se presentará el 13 de febrero con una fiesta en el restaurante Arola del Museo Reina Sofía.

Hombresenfalda pretende demostrar que, mientras la sociedad acepta sin prejuicios que la mujer se apropie de los moldes masculinos, los códigos en la vestimenta del hombre siguen siendo estrechos y aburridos. Sólo los diseñadores más arriesgados apuestan por un cambio que reivindica la condición hipermasculina de la falda frente a la tiranía del pantalón.