Annan alerta de que ningún país está a salvo de la gripe aviar

El secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, mantuvo ayer activas las alertas ante la posibilidad de que se desencadene una pandemia de gripe aviar a escala mundial, y advirtió en este sentido que ninguna región del planeta está a salvo. "Las campanas de alarma suenan cada día más fuerte", dijo. E instó a los Gobiernos de todo el mundo a que estén preparados para hacer frente a la peor de las situaciones y no esperen a que se desencadene la crisis, porque será tarde. "Es un reto colectivo que requiere de un esfuerzo extraordinario", manifestó.

Annan fue contundente al afirmar que ningún país puede permitirse ignorar la amenaza ni minimizar los riesgos, y volvió la vista a los estragos de la pandemia de 1918. "Sabemos qué pasa cuando millones de personas mueren y millones son infectadas; cuando los sistemas de salud se sobrecargan; cuando familias, comunidades y sociedades son devastadas; cuando el transporte y el comercio, la educación y otros servicios se colapsan o dejan de funcionar; cuando el progreso económico y social de las naciones en peligro retrocede", dijo Annan ante la Cumbre Mundial de la Salud organizada por la revista Time. Añadió que cuando el virus causante de la actual gripe aviar (H5N1) llegue a transmitirse a los humanos "apenas tendremos unas semanas para ver cómo se expande, antes de que la situación esté fuera de control".

Señaló el secretario general de Naciones Unidas que la comunidad internacional debe actuar de inmediato en siete frentes: invertir en controlar la enfermedad; cambiar el modo de coexistencia de los humanos con los animales de granja; elaborar planes nacionales de emergencia; asegurar el acceso a los antivirales y producir más vacunas; una mayor transparencia y cooperación en lo científico; cultura de comunicación; y liderazgo político en la respuesta.

La ONU deja claro que no sabe todavía si el brote de gripe aviar degenerará en una pandemia humana. Pero Annan alertó contra aquellos que ponen trabas a la información, a que la gente sepa los riesgos del virus. "El silencio es sinónimo de muerte", remachó.

En paralelo a la dramática intervención de Annan, el Comité Económico y Social de la ONU (Ecosoc) mantuvo ayer un debate sobre la gripe aviar en el que los participantes destacaron la necesidad de que una respuesta colectiva ante un problema que Jan Eliasson, presidente de turno de la Asamblea General, calificó de "tormenta intercontinental". "Un sistema de prevención y de respuesta bien organizado es clave", añadió.

La FAO, contra el pánico

Louise Fresco, de la Agencia para la Agricultura y la Alimentación (FAO), restó dramatismo al debate: "Se trata de un problema urgente y complejo. Pero no hay motivo para el pánico. Existen casos que reflejan que con la preparación adecuada se puede lidiar con la situación", apostilló. Para Fresco, el verdadero obstáculo reside en conseguir el control y contener la dispersión del virus a través de las aves migratorias. En el caso de las granjas, añadió, prevenir la transmisión al ser humano resulta posible en la actualidad. Pero Fresco advirtió de que en países como China y Vietnam hay una alta concentración de aves de corral que provoca que la enfermedad circule con facilidad.

Para la Organización Mundial de la Salud (OMS), que los próximos días 7 y 8 celebrará una reunión sobre la gripe en Ginebra, la clave está en "reducir al máximo el riesgo de emergencia del virus, para evitar que mute con facilidad". La OMS insiste en que es importante "minimizar" la exposición del ser humano a animales infectados. "Si llega la pandemia, todo será tarde", dijo el representante de la OMS, quien reconoció que los antivirales pueden atenuar la pandemia en una fase temprana.