800 viticultores del Penedès exigen "un precio digno" para la uva

Cerca de 800 viticultores catalanes se manifestaron ayer nuevamente en Vilafranca del Penedès para reclamar "un precio digno" para la uva que cosechan y, de paso, plantear abiertamente la posibilidad de no empezar la vendimia hasta que no alcancen un acuerdo con las empresas elaboradoras a las que venden su producto. En la concentración participaron 150 tractores, que bloquearon la carretera N-340.

Poco ha cambiado desde que, hace un año, los viticultores se manifestaron en la capital del Alt Penedès reclamando lo mismo. Los sindicatos agrarios exigen que las empresas elaboradoras de vino y cava compren la uva a un precio más elevado. Los agricultores aseguran que venden su producto a un precio que no les permite ni cubrir los costes. Señalan directamente a Freixenet, Codorníu y Bodegas Torres, los tres gigantes del sector en Cataluña, como máximos responsables de la situación.

La iniciativa de la manifestación de ayer fue de Unió de Pagesos, pero esta vez contó con el respaldo de ASAJA, JARC y Associació de Viticultors del Penedès. Los viticultores, que ya tuvieron sus roces con CiU, hacen corresponsable de la situación al tripartito y desconfían de la gestión del consejero de Agricultura, Antoni Siurana. Joan Aguado, director general del Instituto Catalán de la Viña y el Vino, afirma que la Generalitat hace todo lo posible para que productores de uva y empresas elaboradoras dialoguen y lleguen a un buen acuerdo sobre el precio. Pero advirtió también de que es el mercado, con problemas de excedentes y con el consumo en descenso, el que marca la política de precios.