África, cada vez más atrasada

África, el segundo continente en tamaño del mundo, ocupa el 20% de la tierra emergida. Su población (unos 850 millones) supone el 14% de la población mundial.

Botsuana, la República Democrática del Congo y Suráfrica producen el 50% de los diamantes del mundo. En Ghana, Suráfrica y Zimbabue se extrae casi el 50% de la producción mundial de oro.

De todos los continentes, es el que tiene una mayor proporción de habitantes que viven en extrema pobreza, especialmente en la zona subsahariana, en la que los índices de desarrollo están empeorando. El hambre es el compañero habitual de la pobreza.

Las enfermedades transmisibles son un problema enorme en el África subsahariana. En 2003, había 26,6 millones de infectados con el virus de la inmunodeficiencia humana, 3,2 millones se infectaron ese año y 2,3 millones murieron a causa del sida.

La situación de la mujer en África es la peor de todos los continentes. Veintitrés millones de niñas no asisten a la escuela. La ausencia de mujeres educadas contribuye a perpetuar la pobreza, la incidencia de las enfermedades infantiles y la expansión del sida.

En los aspectos económico y político, el peso de la deuda y los recurrentes conflictos bélicos han marginado a África del proceso de globalización. Su participación en el comercio, la inversión y los avances tecnológicos ha disminuido en la última década.