El Ejecutivo vasco alerta de la posible extinción de la anchoa cantábrica

La anchoa se halla al borde de la desaparición en el Cantábrico, según las conclusiones del informe científico que ha elaborado la sociedad pública Azti, dependiente de la Consejería vasca de Agricultura y Pesca. El análisis concluye que las capturas deben paralizarse en ese mar al menos lo que resta de año para impedir su extinción. El estudio, elaborado por un grupo de especialistas embarcados en siete pesqueros entre los pasados días 12 y 17, en plena costera, ha constatado que el número de anchoas adultas y los huevos es "tres veces menor" que en años anteriores.

El informe considera "muy probable" que el número de ejemplares haya caído ya por debajo de la llamada biomasa límite, lo que supone el riesgo de desaparición de la especie en el Cantábrico. "Hay casos de otros mares en los que ha desaparecido", recordó el consejero de Pesca, Gonzalo Sáenz de Samaniego, quien ayer inició contactos con sus homólogos de las demás comunidades del Cantábrico para pactar una postura conjunta.

La costera de la anchoa comenzó el pasado 15 de abril, y desde entonces la flota de bajura cantábrica ha pescado apenas 160 toneladas, una cifra que no se había registrado nunca antes en esta pesquería, según el informe. Para estas fechas se debería haber alcanzado el 40% de las capturas de todo el año, que rondarían las 4.500 toneladas, según afirmó Sáenz de Samaniego.

El consejero ha remitido ya el informe a la UE para que acuerde un paro biológico general durante seis meses, incluyendo a la flota francesa, que tiene previsto iniciar su propia costera el 1 de junio.

Toda la flota del Cantábrico sigue amarrada a la espera de la reunión del sector el martes con la ministra de Agricultura y Pesca, Elena Espinosa. Los representantes de las cofradías pretenden llevar ese día a Madrid a los 3.000 pescadores que componen la flota de bajura para presionar por sus reivindicaciones. Los pescadores dicen que el ministerio les comunicó ayer mismo que en ese caso suspenderá la reunión, algo que el departamento niega.