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Red Eléctrica sostiene que no puede haber AVE sin la línea de 400.000 voltios

La provincia de Girona sólo produce el 10% de la electricidad que consume

"La línea es necesaria para que el tren de alta velocidad llegue a Girona". Con esta claridad defiende la empresa Red Eléctrica Española (REE) la necesidad de construir la polémica línea de 400.000 voltios entre Bescanó (Selva) y la frontera francesa. En un informe interno, la empresa pública impulsora del proyecto expone argumentos que ponen contra las cuerdas al Gobierno catalán, profundamente dividido por la construcción de esta línea. Según Red Eléctrica, el conjunto de las líneas de distribución de la provincia de Girona se encuentran "saturadas".

Los argumentos de REE a favor de la nueva línea son tan numerosos como claros. Asegura la empresa que desde el año 1996 el incremento del consumo eléctrico en Cataluña ha sido del 46% y que más de la mitad de este aumento se ha producido en la provincia de Girona. Esto, sumado al hecho de que Girona tiene un tendido eléctrico con una media de edad de 20 años, pone en evidencia, según REE, la necesidad de prolongar la línea que llega a Bescanó hasta la frontera francesa, para alimentar el AVE, pero también para dar energía a Girona, una provincia que, según la compañía, sólo produce el 10% de la energía que consume.

La empresa pública de distribución eléctrica desacredita en el informe todos y cada uno de los argumentos de los contrarios al nuevo tendido. La necesidad de interconexión eléctrica entre España y Francia es tal, afirma el informe, que no bastaría con modernizar la línea de 400.000 voltios que ya llega a Cataluña a través de la comarca del Ripollès. Según Red Eléctrica, sólo construyendo una nueva línea que pueda transportar energía en ambos sentidos se podrá garantizar el objetivo de doblar la actual capacidad de interconexión con Francia.

Sin alternativas

La propuesta de Iniciativa per Catalunya de alimentar el AVE con dos líneas de 220.000 voltios en lugar de una de 400.000, a la que atribuyen un mayor impacto ambiental, tampoco es del agrado de REE. Según esta empresa, construir las dos líneas de menor voltaje "tampoco evitaría la necesidad de desarrollar una red de 400.000 voltios en la zona norte de Girona para alimentar el AVE y el mercado de esta zona".

La defensa a capa y espada de una línea de 400.000 voltios centrada en la alimentación del tren de alta velocidad no es casualidad. Red Eléctrica sabe que el acuerdo que permitió la formación del actual Gobierno catalán, el Pacte del Tinell, sólo prevé la construcción de nuevas líneas de alta tensión si éstas son imprescindibles para el AVE. En caso contrario, el Gobierno tripartito no puede pronunciarse hasta que se haya elaborado y consensuado el Plan de Energía de Cataluña 2006-2015, que todavía tardará un mes en ver la luz.

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En los próximos 30 días, sin embargo, las negociaciones entre los socialistas, Esquerra e Iniciativa per Catalunya se prevén tumultuosas, pues el Departamento de Industria, en manos del socialista Josep Maria Rañé, defenderá con uñas y dientes la conexión internacional con una potencia de 400.000 voltios, como quieren REE y el Ministerio de Industria.

Esquerra Republicana e Iniciativa, sin embargo, sólo acceden, al menos por ahora, a buscar soluciones para alimentar el AVE y no ven la necesidad de la conexión internacional ni de la línea del voltaje que defienden REE y el ministerio.

Tampoco ven esta necesidad los alcaldes de una treintena de municipios de Girona afectados por el paso del tendido eléctrico. Estos ediles, sin embargo, se mostraron ayer partidarios de aceptar una línea soterrada si no hay más remedio que construir la conexión. No es la primera vez que se reclama un soterramiento de la infraestructura aprovechando obras del AVE. Los municipios acordaron ayer encaminar sus alegaciones al proyecto en el sentido de aprovechar los corredores de infraestructuras o trazados de tendidos eléctricos ya existentes, todo para evitar "la afectación de nuevas áreas urbanas, rústicas o naturales".

La mayoría de los alcaldes participantes en la reunión de ayer en Girona advirtieron de que hasta ahora nadie les ha demostrado la necesidad de la línea ni tienen datos fehacientes sobre la potencia y el trazado que pretende impulsar Red Eléctrica.Muchos de los alcaldes y concejales que acudieron a la reunión sobre la línea estarán mañana en un acto transfronterizo de oposición en la localidad francesa de El Portús. El acto ha sido convocado por las entidades catalanas Salvem l'Empordà y No a la MAT, y la que agrupa a los opositores en territorio francés, Non a la THT.

Está previsto que acudan al encuentro el alcalde de Perpiñán, Jean-Paul Alduy, y el presidente del Consejo General de los Pirineos Orientales, Cristian Bourquin. La Diputación de Girona y los consejos comarcales del Gironès y el Pla de l'Estany han confirmado que enviarán representantes.

El objetivo de este encuentro es intentar consensuar un documento institucional "más duro y comprometido" en el rechazo a la línea, según afirmó ayer Joan Martí, representante de Salvem l'Empordà. Martí cree que en Francia existe "menos miedo a las órdenes de los partidos", de ahí que su oposición sea hasta ahora más rotunda.

En Cataluña estas protestas chocarán con los planes del Departamento de Industria, que está ultimando el Plan de Energía de Cataluña, el proyecto gubernamental que evaluará las necesidades energéticas de esta comunidad para los próximos 10 años. Los redactores del plan consideran, como Red Eléctrica Española, que la línea es necesaria para alimentar el tren de alta velocidad y que su potencia no debe ser inferior a 400.000 voltios. En los actuales borradores del texto consta como "urgente" la construcción de la la línea transfronteriza, tanto para el AVE como para hacer frente a la "crítica situación" de la red eléctrica gerundense.

En una perspectiva más global, el plan también defenderá la construcción de la línea para reforzar la seguridad de los sistemas eléctricos del resto de la península Ibérica. Este punto configura otro foco de discrepancias en el Gobierno catalán. Iniciativa y Esquerra son claramente contrarios a que la línea sirva para que Francia pueda dar salida a los excedentes energéticos procedentes de su amplia red de centrales nucleares. La actitud de estos dos partidos, sin embargo, choca con la voluntad de los gobiernos de España y Francia, decididos a conectar sus infraestructuras, tanto viarias como energéticas.

El Plan de Energía de Cataluña prevé estas conexiones, pero sin olvidar su objetivo de fondo: reducir en trono al 10% el consumo energético de Cataluña previsto para el año 2015. Según explicó ayer el consejero Rañé, si sigue el actual ritmo de crecimiento de la demanda energética, Cataluña consumirá el equivalente a 20.100 toneladas de petróleo, frente a las 15.000 actuales. El Gobierno catalán prevé moderar este incremento multiplicando casi por tres la producción de energías renovables mediante placas solares, biogás y molinos de viento. Si actualmente este tipo de producción apenas satisface el 2,9% del consumo energético total, el Ejecutivo catalán pretende elevarlo hasta el 8% en cinco años.

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