Bruselas abre dos nuevos expedientes a Londres a causa de Gibraltar

La Comisión Europea ha abierto otros dos expedientes a Londres por culpa de las particulares normas que imperan en Gibraltar, y que se unen a los procedimientos en curso contra un régimen fiscal incompatible con las normas europeas y que han convertido al Peñón en un paraíso fiscal.

El primero de los expedientes, abierto el 16 de marzo, se ha iniciado por la discriminación que sufren los pensionistas españoles de Gibraltar que no residen ya en el Peñón. El segundo, se debe al régimen fiscal que aplica la colonia británica a los pagos de intereses y cánones entre empresas asociadas de diferentes países de la UE.

Respecto al primer expediente, Bruselas cree que Gibraltar aplica una norma discriminatoria a los ex trabajadores españoles del peñón ya jubilados al exigirles que residan ahí para beneficiarse de una ayuda asistencial asignada al resto de los pensionistas. La UE considera que se está aplicando una discriminación basada en la nacionalidad, lo que prohíben las normas europeas. La apertura del expediente se produce dos años después de iniciada. Ahora, Londres dispone de dos meses para presentar alegaciones. Después del trámite, el caso puede acabar en el Tribunal de Justicia europeo.

El segundo expediente, notificado ayer, se debe al hecho de que la colonia británica no esté aplicando una directiva que entró en vigor en enero de 2004. "Los impuestos recaudados en la fuente, bien por retención (retención a cuenta) bien por estimación de la base imponible", dice el comunicado oficial, "pueden exigir largos procedimientos administrativos y a veces conducen a una doble imposición", mientras que la directiva ya en vigor "prohíbe que los pagos de intereses y cánones se graven con impuestos en el Estado miembro donde se generen, cuando sean realizados por una empresa a otra asociada suya que esté establecida en otro Estado miembro".

Londres aceptó el pasado 18 de febrero el plan de Bruselas para terminar en cinco años con las ventajas fiscales de que disfrutan las empresas extranjeras sin actividad dentro del peñón.