Pinochet podrá ser juzgado por el asesinato del general Prats

La Corte de Apelaciones de Santiago desaforó ayer por 14 votos contra 9 al ex dictador chileno Augusto Pinochet por las fundadas sospechas de su participación en el asesinato del ex jefe del Ejército general Carlos Prats y su esposa, Sofía Cuthbert, asesinados por la DINA, la policía secreta del régimen, en 1974 en Buenos Aires. A los 89 años, sin el apoyo de la derecha, el ex dictador se enfrenta a una compleja situación judicial.

Augusto Pinochet tiene que vérselas con un juez que investiga sus millonarios depósitos secretos, otro que debe decidir si lo procesa por los crímenes de la Operación Cóndor, después de que las Cortes de Apelaciones y Suprema le quitaran su inmunidad, y ahora está ante un nuevo desafuero, que resolverá el Tribunal Superior. La sentencia, dictada cuatro días después de que el presidente Ricardo Lagos diera a conocer el informe de una comisión independiente que comprobó la participación del Estado en 28.000 casos de tortura y prisión política en la dictadura, se resolvió con la misma votación que se dio en el desafuero anterior por la Operación Cóndor.

Al término de una reunión de casi dos horas del pleno, el presidente de la Corte, Juan González, informó de que la mayoría de los magistrados resolvió acoger la solicitud de desafuero de Pinochet "porque había antecedentes suficientes como para dar lugar a la formación de causa", es decir, para someterlo a proceso por el doble crimen.

Pinochet puede apelar el fallo ante la Corte Suprema, lo que se prevé hará su defensa como en otros procesos, planteando que su salud no le permite afrontar un proceso. Sin embargo, la Corte de Apelaciones dejó poco espacio para este argumento, porque en la sentencia resolvió que en esta etapa de antejuicio, donde los tribunales resuelven si el ex dictador conserva o no su inmunidad por su condición de ex presidente, no corresponde discutir la salud del inculpado, lo que debe ser resuelto por el magistrado a cargo del caso, Alejandro Solís.

Los querellantes reaccionaron con alegría al conocer el fallo. "Esto hace posible que se haga justicia por el crimen del general Prats", afirmó la abogada Pamela Pereira, mientras Cecilia Prats, hija menor del matrimonio asesinado, calificó el fallo de "muy importante"para demostrar la responsabilidad de Pinochet.

Por este crimen, considerado la primera actuación sobre el terreno de la Operación Cóndor, nombre que recibió la coordinación de los aparatos represivos de las dictaduras suramericanas en los años setenta y ochenta para exterminar opositores, están procesados en Chile como autores de homicidio calificado el ex jefe de la DINA, general Manuel Contreras, y otros seis miembros de la cúpula y ex agentes de este organismo.

En Argentina, la juez María Servini de Cubría ha procesado también a la DINA por el doble asesinato y un ex agente fue condenado a cadena perpertua. Hace dos años, la Corte Suprema chilena rechazó una petición de extradición de Pinochet hecha por Servini de Cubría, quien ahora ha insistido pidiendo desaforar al ex dictador.

Prats, antecesor de Pinochet en la comandancia en jefe del Ejército, un general leal al ex presidente Salvador Allende (1970-1973), de cuyo Gobierno fue ministro y vicepresidente, tuvo gran ascendiente sobre la oficialidad y mientras se mantuvo en el cargo fue el principal freno al golpe militar en incubación, el que se produjo al poco tiempo de su salida del Ejército.

A Pinochet sólo le queda apelar a la salud para intentar eludir el creciente cerco judicial en que está atrapado.