Los psiquiatras advierten sobre la saturación de las consultas públicas

El incremento "inapropiado" de la demanda y la limitación de recursos amenaza con saturar la actual red de salud mental de Osakidetza. Esta es una de las advertencias que han realizado los psiquiatras del Servicio Vasco de Salud, que cada año deben atender alrededor de 18.000 pacientes nuevos. El incremento de casos no significa que la salud mental de los vascos sea ahora peor que hace unos años, precisan los expertos, sino que los ciudadanos se han desinhibido y acuden más a los psicólogos y psiquiatras en busca de soluciones a problemas de la vida diaria.

El hecho saludable de que acudir al psiquiatra ya no suponga ningún estigma social está suponiendo, por otro lado, un serio problema al sistema, que el año pasado atendió a 72.371 personas. El año anterior la cifra de pacientes rondó los 75.000. La existencia de una red estable y bien equipada de unidades de corta estancia y de centros de salud mental no es suficiente frente a una demanda que cada día crece más. El consejero de Sanidad, Gabriel Inclán, expuso ayer esta preocupación en el Parlamento al presentar el Plan de Asistencia Psiquiátrica y Salud Mental para el periodo 2004-2008.

Inclán puntualizó durante su comparecencia que la red de asistencia psiquiátrica de Euskadi goza de buena salud, con una demora media menor a un mes para la primera consulta de adultos. Sin embargo, el consejero reconoció que todo es mejorable y puso el acento en que la consulta a los psiquiatras está creciendo de una manera inquietante debido a que acuden los ciudadanos a plantearles preocupaciones y problemas de la vida diaria que no deberían ser atendidos por estos especialistas. "Hay cuestiones que antes se resolvían de otra manera y que hoy acaban en el psiquiatra, que les da el alta el mismo día que van. No digo que no deban ser atendidos, sino que hay formas mejor de hacer las cosas", indicó.

Catálogo de prestaciones

El consejero abogó por definir un catálogo de prestaciones, que fije que aspectos debe atender la psiquiatría. Según el responsable de Salud Mental de Osakidetza, Álvaro Iruin, al menos el 10% de los pacientes que acuden a la consulta no presenta ninguna patología psiquiátrica y otro 30% sufre una dolencia leve. A la mayor parte de los pacientes atendidos en la red de salud mental los especialistas les diagnosticaron neurosis. Este concepto engloba desde las depresiones leves hasta los transtornos de adaptación, obsesivos o de personalidad.

El plan presentado por Inclán, que supone un adelanto de la estrategia que va a seguir el Departamento de Sanidad en el campo de la psiquiatría en los próximos años, se marca dos grandes objetivos: la potenciación de la red comunitaria, es decir, de los centros extrahospitalarios de salud mental, y la paulatina reducción del número de camas de los hospitales psiquiátricos, donde muchos enfermos permanecen internados durante años por la falta de unos servicios sociales adecuados que les puedan recoger y atender en condiciones.

Los centros de salud mental de Osakidetza tienen una peculiaridad: están integrados en los centros de atención primaria, lo que les hace más accesibles y familiares al mantener a las personas con transtornos mentales en su entorno social y procurándoles la máxima autonomía. Por otro lado se encuentran los hospitales psiquiátricos. En la actualidad, Euskadi cuenta con cuatro hospitales públicos de este tipo (Zamudio, Zaldibar, Bermeo y de Álava), que cuentan con 850 camas. A ellas hay que añadir las aproximadamente 150 que existen en las plantas de psiquiatría de los hospitales generales.

Junto al refuerzo de la red extrahospitalaria, Osakidetza también pretende reducir en los próximos años el elevado gasto farmacéutico, algo común al conjunto de la sanidad, y atender los problemas derivados del envejecimiento y de la inmigración (con la proliferación de transtornos de adaptación). La mejora de la cualificación de los profesionales, sobre todo los que atienden a los niños y a los problemas de toxicomanías, es otros de los campos donde se actuará.

Los portavoces del PP y PSE reprocharon al consejero que acudiera al Parlamento a presentar el plan sin adjuntar una memoria económica que refleje el dinero que se va a gastar el departamento en implantar esta serie de mejoras. Inclán les replicó que el documento no marca cifras económicas porque se trata de un plan de gestión y precisó que el dinero figurará cuando se vayan poniendo en marcha los planes concretos que lo desarrollen, que en total suman 47.