AENA tala 191 árboles junto al Jarama

IU denunció ayer que AENA, el organismo público que gestiona el aeropuerto de Barajas, está llevando a cabo, en las obras de ampliación del aeródromo, una "barbarie ecológica": la tala de 191 árboles que se encontraban fuera de la zona de declaración ambiental, en las riberas del Jarama. La concejal Concha Denche dijo haber sido testigo ayer mismo del corte de "un árbol de gran tamaño y en estado saludable".

Las obras de ampliación del madrileño aeropuerto de Barajas pueden estar afectando al entorno más allá de los límites dibujados en su declaración de impacto ambiental. Así lo denunció ayer la concejal de Medio Ambiente de Izquierda Unida, Concha Denche, después de realizar una visita a la zona.

La concejal aseguró haber sido "testigo directo" de cómo uno de los operarios talaba un árbol "de gran tamaño y en estado saludable, como el resto de los que se han laminado de la ribera del río Jarama".

Según los datos recabados por IU, un total de 191 árboles han desaparecido de las márgenes del río Jarama como consecuencia directa de las obras que desde el año 2000 realiza AENA, el organismo dependiente del Ministerio de Fomento que gestiona los aeropuertos. Los ejemplares desaparecidos son 33 sauces, 42 chopos, 59 alisos, 48 fresnos y ocho olmos. Denche subrayó la "gran importancia de este ecosistema de ribera" devastado, tanto en "su vertiente de flora como en cuanto a su fauna". Y destacó la importancia de la desaparición de una colonia de olmos, "el único bosquete que había sobrevivido a la enfermedad de la grafiosis [una plaga de hongos]".

El organismo público podría ser obligado a asumir responsabilidades legales, puesto que estos "destrozos", como los calificó Denche tras realizar una visita a la zona, "se han producido dentro de la zona de exclusión marcada por la declaración de impacto ambiental", y ese hecho puede suponer un delito ecológico.

"Hasta el momento no hemos recibido justificación a esta barbaridad", añadió la edil. En el caso de que AENA pretenda justificar las talas de árboles aludiendo a los "problemas de visibilidad" que éstos pudieran provocar, continúa Denche, "estaríamos ante un gravísimo caso de imprevisión, ya que no es de recibo sostener esta causa a escaso tiempo de la inauguración de una obra de esta envergadura que, en cualquier caso, debería estar prevista en el proyecto".

"Estamos ante un caso injustificable que, por desgracia, ya no es reversible y que supone haber dejado más de 250 metros de ribera del Jarama como un solar, sólo salpicado por los troncos de árboles talados de forma indiscriminada", añadió.

Este periódico no consiguió recabar ayer la versión de AENA sobre la denuncia de IU.