Maravilloso rojo picota

Estamos presenciando un destape enológico sorprendente y alentador. Cada vez son más los técnicos, cuyo prestigio y solvencia no trascendían el círculo profesional, que deciden trabajar para sí mismos y elaborar un vino que resuma su sabiduría y personalidad. Tal es el caso de Jesús Navascués, cuyo talento se ha manifestado en numerosas etiquetas ajenas. Ahora le ha llegado el turno del vuelo en solitario -en compañía de Ángel Lázaro y Rafael Díaz- y la realización de un sueño en su tierra, Cariñena, un vino capaz de codearse con los grandes.

Así nace Care, prodigiosa combinación de fruta, taninos jugosos, madera noble y juego de especias. Se trata de un tinto elaborado a base de garnacha con más de 80 años, y un cabernet sauvignon de suficiente antigüedad y escasa producción como para evitar los habituales e insufribles verdores. En su perfeccionismo, el vino sólo ha conocido el mejor roble, tanto en la fermentación como en la crianza tras una larga maceración de 24 días. Su maravilloso color rojo picota anticipa un aroma denso, frutoso, bañado de café y humo. Y en la boca, la potencia sápida se viste de terciopelo para entonar la melodía armoniosa del buen gusto.