España pide que entre 40 y 60 grandes pesqueros gallegos faenen en aguas marroquíes

El Gobierno marroquí concretará hoy la oferta que hace diez días hizo el rey Mohamed VI de abrir sus caladeros a los pesqueros del norte de España, sobre todo los gallegos, para mostrar su solidaridad con las poblaciones damnificadas por la catástrofe provocada por el naufragio del petrolero Prestige. Tras este anuncio real, una delegación técnica del Ministerio de Agricultura y Pesca viajó, la semana pasada, a Rabat para hacer una petición de lo que interesa al sector pesquero gallego en aguas marroquíes: entre 40 y 60 barcos en determinadas condiciones.

"Hemos recibido de España una solicitud de mínimos que intentaremos mejorar en la reunión ministerial", explica una fuente gubernamental marroquí. Por primera vez desde hace muchos meses, un ministro español, el de Agricultura, Miguel Arias Cañete, viaja hoy a Rabat. El titular marroquí de Pesca, Mohamed Taieb Rhafes, le precisará en que consiste el ofrecimiento real. "En ningún caso se tratará de una negociación", añade la misma fuente.

En la reunión técnica que precedió al encuentro de hoy, los colaboradores de Rhafes indicaron que el acceso de los barcos gallegos a sus aguas, un mínimo de tres meses, se haría en condiciones similares a las de los pesqueros marroquíes. Deberán pagar la licencia de pesca y no podrán faenar determinadas especies, como los cefalópodos, ni tampoco en algunos caladeros.

A diferencia del acuerdo pesquero entre Rabat y la UE, que expiró en diciembre de 1999, no se abonará una cantidad global al Estado marroquí, ni tendrá que haber tripulación marroquí a bordo de los pesqueros y no será necesario descargar parte de las capturas en puertos de Marruecos.

"Aliviar el sufrimiento"

"Créanme, estamos muy contentos de poder acoger a los barcos gallegos rápidamente, lo antes posible", dijo el viernes el primer ministro marroquí, Driss Jettu, que apuesta, aparentemente, a fondo por la superación de la crisis con España. "El objetivo de Mohamed VI es contribuir a aliviar el sufrimiento de aquellos que en Galicia viven de la pesca", agregó.

El portavoz parlamentario para la Pesca del grupo popular, Carlos Mantilla, señaló, sin embargo, que la repercusión del ofrecimiento marroquí para la pesca de bajura gallega, la más damnificada, será "mínima o nula" porque esos barcos no están en condiciones de llegar hasta esas aguas. Serán los buques de altura los que podrán sacar provecho de ella.

En Galicia e, incluso, en Andalucía, de dónde procedían la mayoría de los barcos que se beneficiaban del acuerdo de pesca, la iniciativa real ha suscitado la esperanza de que se abra una vía para la conclusión de nuevos acuerdos pesqueros con Marruecos, probablemente de índole privada. Parece poco probable que la UE reanude conversaciones con Rabat. España carece de competencias para poder hacerlo de forma bilateral.