El Consorcio ocultó un convenio sobre sus inversiones en Argentina

El Consorcio de Aguas Bilbao-Bizkaia, cuya gestión es investigada por el Tribunal de Cuentas, ocultó un acuerdo sobre sus inversiones en Aguas de Buenos Aires que establecía fuertes restricciones a una posible reducción de su participación accionarial en esa empresa argentina. Pese a la existencia de este documento, revelado ayer por el PP, el Consorcio se ha desprendido este año de la mayoría de sus acciones en esa firma -ha pasado del 20% al 3,3%-, lo que puede tener "consecuencias económicas" para la entidad, dijo el edil popular Antonio Basagoiti.

Basagoiti añadió que la representación jurídica de uno de los socios del Consorcio en Argentina, la firma italiana Impregilo, baraja ya presentar una demanda por "el incumplimiento de este contrato secreto". La entidad de aguas negó horas después que se trate de un acuerdo secreto, se limitó a calificarlo de "privado" y rechazó cualquier incumplimiento del documento. Para ello argumentó que "formalmente" sigue siendo "el titular del 20% de las acciones" y lo que ha hecho este año ha sido reducir el riego en la inversión "mediante contratos en cuentas en participación dejándolo reducido al 3,33% del capital social" de Aguas de Buenos Aires.

La inversión del Consorcio en Argentina se remonta a 1999, cuando entró en Aguas de Buenos Aires con el 20% de acciones, junto a la firma argentina Urbaser (23%) la italiana Impregilo (casi el 40%) y otra sociedad dependiente de ésta (4,5%). La crisis en aquel país afectó al negocio, lo que llevó al Consorcio a bajar su participación al 3,3%, al traspasar un 10% a Urbaser y otras dos participaciones del 3% a la BBK y la Spri. Esta decisión se conoció en junio sólo después de que el PSE señalase, usando documentación de la propia entidad, que se habían perdido 7,2 millones de los 10,7 invertidos.

La dirección del Consorcio anunció en una asamblea que su inversión ascendía en realidad de 1,8 millones de euros, lo que ya entonces criticó la oposición por su "falta de transparencia".

El documento revelado por el PP añade más polémica a este asunto, ya que establece condiciones que complican cualquier reducción del accionariado. "Se firman acuerdos secretos y encima los incumplen", censuró Basagoiti, quien pidió una asamblea extraordinaria sobre este asunto, un informe jurídico del acuerdo y datos sobre los perjuicios económicos de la reducción del accionariado. "Por eso en la asamblea [en la que se conoció la reducción de la participación] no quisieron decirlo muy alto, porque tenían esto firmado", agregó.

La dirección del Consorcio, que controla el PNV, señaló ayer que este acuerdo "privado" era conocido por su asamblea, que autorizó "sin ninguna oposición en 1999 la licitación" en Argentina y "la aportación del 3,33%".