Belisario Betancur inaugura el Foro de Editores

Con una intervención salpicada de anécdotas y cargada de humor, el ex presidente de Colombia Belisario Betancur abrió ayer las maratonianas jornadas del Foro Internacional de Editores. A las distintas iniciativas de la Feria Internacional del Libro, que siempre han tenido una dimensión fuertemente cultural -para conectar al público con los autores y los grandes temas de nuestro tiempo- y otra comercial -para generar el máximo número de ventas de libros, de derechos y cuanto se tercie-, esta XVI edición de la Feria de Guadalajara abre un nuevo espacio para los editores: para que reflexionen sobre sus problemas específicos y, al mismo tiempo y como consecuencia de ello, busquen fórmulas de cooperación y de integración de sus respectivos mercados.

Lo dijo de manera muy clara Adelaida Nieto, directora general del Centro Regional del Libro para América Latina y el Caribe (Cerlalc), en una breve intervención poco antes de que hablara Belisario Betancur: "Hay que construir las preguntas que este oficio necesita".

El Cerlalc, junto al Grupo Interamericano de Editores (GIE), además de la Federación de Gremios de Editores de España o de la Secretaría de Educación Pública de México, están detrás de esta iniciativa que, como explicó Emiliano Martínez (presidente del español Gremio de Editores), "de lo que trata es de cultivar y de amueblar el espacio iberoamericano del libro".

Es un proyecto que debe proponer medidas concretas y no quedarse en fórmulas bienintencionadas. "Es necesario exigir y proponer políticas públicas que favorezcan al libro", explicó Emiliano Martínez, quien añadió varias propuestas concretas: "El desarrollo de la lectura en las escuelas, la creación de bibliotecas, la libre circulación del libro, que no haya nuevos impuestos que lo graven y la búsqueda de una fiscalidad laborable".

Dos días de sesiones y un programa realmente intenso: 18 propuestas, entre mesas de trabajo, intervenciones y actos colectivos. Lleno total en la inauguración. El precio fijo de los libros, los retos de la industria editorial, los tratados comerciales, los mercados potenciales del libro, el ISBN, la colaboración o el conflicto con los medios electrónicos son parte de las cuestiones que habrán de tratar.

Y en el horizonte, "la conquista de la utopía de la libre circulación del libro", como dijo Betancur. Para ello, comentó, hace falta democratizar el libro, luchar contra las subidas abusivas del IVA, estimular la producción intelectual, generar empleo cualificado o fomentar el nacimiento de librerías y bibliotecas, entre otras múltiples iniciativas.

Emiliano Martínez resaltó, una vez más, la masiva presencia de editores españoles en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara. "Han venido más de 130 editores, lo que demuestra el interés por México, un país en el que, pese a la caída general de importaciones, la de libros españoles ha crecido en el último año y lo sigue haciendo en éste". Y también destacó el buen momento de la edición en México, "muy estimulada por distintas políticas gubernamentales. Recientemente se han comprado para bibliotecas públicas más de 30 millones de ejemplares".