Una convocatoria de becas de Defensa suprime el seguro médico a las embarazadas

Las becas de investigación que convoca para 2003 el Instituto Nacional de Técnica Aerospacial (INTA) del Ministerio de Defensa, y el Centro de Astrobiología (CAB), que financian este ministerio y el de Ciencia y Tecnología, prevén la supresión del seguro médico durante la interrupción del disfrute de la beca "por causa de fuerza mayor, maternidad o similares". Además, los becarios dejarán de cobrar el importe de su beca durante esa interrupción y sólo podrán volver a disfrutar del tiempo restante de la beca si existe dinero para pagarles y un informe favorable del director del centro.

La Federación de Jóvenes Investigadores-Precarios ha denunciado la situación de discriminación que actualmente sufren gran parte de las investigadoras al no tener acceso a prestaciones sociales tan básicas como es el permiso por maternidad. Para ello se basan en casos como el muy reciente del INTA y el CAB, cuyas convocatorias de 25 becas predoctorales y de formación y 4 becas postdoctorales respectivamente especifican que las investigadoras que den a luz durante el disfrute de la beca no tendrán derecho a los ingresos correspondientes durante el periodo de ausencia por causa del embarazo ni al seguro médico y por accidentes ligado a la beca. Ambas convocatorias van firmadas por el director general del INTA, Fernando José Cascales Moreno.

Ayer, Jaime Lissavetzky, diputado del PSOE, se mostró indignado por esta discriminación "más propia del siglo XIX que del XXI" y aseguró que el hecho de que un organismo público de investigación la practique refleja una política del Gobierno "antigua, antisocial y discriminatoria" y que el Ministerio de Ciencia y Tecnología no lidera el sistema científico español, por lo que resulta necesaria la regulación a través de un estatuto del becario.

Otros ministerios

En el último año y medio, explica María José Serván, presidenta de la federación, se ha ido introduciendo la figura del permiso de maternidad, antes inexistente, en las becas convocadas por otros ministerios, como el de Ciencia y Tecnología y Educación y Cultura, así como distintas comunidades autónomas. Este permiso va ligado a la percepción -total o reducida- del monto económico de la beca y al mantenimiento del seguro médico y de accidentes.

El Ministerio de Defensa no lo ha hecho así. Fuentes del INTA aseguraron ayer que la adecuación de las convocatorias al futuro estatuto del becario está en marcha, y que, en todo caso, las condiciones actuales se aplicarán con la máxima flexibilidad.

Sin embargo, el proyecto de estatuto del becario se encuentra parado desde que accedió al Ministerio de Ciencia y Tecnología Josep Piqué, como han denunciado los investigadores. El secretario de Estado de Política Científica, Pedro Morenés, ha afirmado recientemente en el Congreso de los Diputados que los becarios no pueden ser trabajadores con derechos laborales y que la redacción del estatuto del becario está siendo consensuada con los otros ministerios, a pesar de que la anterior ministra, Anna Birulés, ya tenía prácticamente redactado este texto, que otorgaba algunos derechos a los becarios, cuando dejó el ministerio.

Contratos

Gonzalo Macho, de la Federación FJI-Precarios, explica que el estatuto sería de todas formas un mero parche, ya que lo lógico serían los contratos desde el principio: "Un titulado debe poder ser contratado con todos los derechos de seguridad social y demás para hacer su tesis doctoral y luego para iniciar su carrera investigadora". José Luis Rodríguez Zapatero, secretario general del PSOE, se reunirá con representantes de la federación el próximo día 28.

En cuanto a las convocatorias del INTA, Serván subraya que nunca antes los investigadores becarios habían visto en este tipo de documentos las especificaciones discriminatorias citadas, especialmente las que indican que las investigadoras embarazadas dejarán de disfrutar del seguro al final de su embarazo y necesitarán después un informe favorable -del director del centro (actualmente Juan Pérez Mercader) en el caso del CAB y del tutor o director de la unidad de formación en los otros casos- para poder cumplir el tiempo restante. Según Serván, es absurdo que se exija un nuevo informe cuando ya se ha hecho la evaluación inicial para seleccionar al investigador becado.

Por otra parte, estas condiciones afectarían también teóricamente a los becarios -hombres y mujeres- que sufrieran un accidente o enfermedad grave que causara la interrupción de la beca.