Seat traslada el 10% de la producción del Ibiza de España a Eslovaquia

'Quien nos paga el salario son los clientes'. Así justificó ayer el presidente de Seat, Andreas Schleef, la decisión de trasladar de Martorell a Bratislava (Eslovaquia) la producción de 20.000 coches del Ibiza, el 10% de este modelo y 5% del total de la planta catalana. La empresa ha decidido el traslado al no aceptar los sindicatos trabajar cinco días en octubre y noviembre para asegurar los pedidos. Los sindicatos critican la decisión y dicen que pone en peligro 5.000 empleos.

Seat emplea a 14.400 trabajadores. UGT, el sindicato mayoritario, estima que corren peligro 500 empleos directos y otros 4.500 indirectos de proveedores, según Manuel Gallardo, secretario general del Metal de UGT en Cataluña.

La decisión golpea fuerte a Seat, integrada en el grupo Volkswagen, porque el nuevo Ibiza es el modelo de más futuro de la empresa. La planta de Martorell, a 30 kilómetros de Barcelona, produce 200.000 unidades del Ibiza al año -1.025 al día-, de los que el 10% se irán a Bratislava. Pero, además, la medida no es temporal. Bratislava fabricará el nuevo Ibiza durante los siete o ocho años de vida que le quedan a este modelo, según fuentes de la dirección de Seat.

El traslado de producción empezará a partir de enero próximo y supondrá casi el 5% de las ventas totales de Seat, que este año rondarán las 470.000 unidades. Si se produjera una bajada de ventas del Ibiza, algo que ni la empresa ni los trabajadores esperan, será Martorell quien deberá reducir la producción porque las unidades que se harán en Bratislava son intocables.

Seat advierte, además, que la negativa puede tener graves consecuencia para la empresa. En un duro comunicado distribuido ayer a la plantilla la dirección dice que 'la poca flexibilidad ha dejado la fábrica de Martorell en una delicada situación que pone en entredicho su capacidad para atraer nuevos productos o volúmenes de producción y, por tanto, compromete su competencia para mantener el empleo y las inversiones'.

Seat es la mayor empresa de Cataluña. Además de sus 14.400 empleos directos genera otros 100.000 en la industria auxiliar.

Fuentes de la dirección señalaron ayer que 'la empresa lo ha intentado todo y ha hecho todos los esfuerzos para evitar traspasar producción'. Estas fuentes afirmaron que ante la negativa de los sindicatos a aceptar trabajar cinco días en octubre y noviembre, la dirección hizo un último intento y consultó por escrito a la plantilla y sólo el 25% de los empleados se mostraron a favor de trabajar. CC OO afirma que la empresa 'busca excusas para justificar una decisión que tenía tomada', según Vicenç Rocosa, secretario general del Metal.