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Chiringuitos, asadores y hamburgueserías concentran las incidencias alimentarias

El 10% de los locales de restauración conserva mal las comidas

Alejandro Bolaños

El sector de la restauración se multiplica en verano, sobre todo en el litoral, donde abren multitud de locales de temporada. Es en estos populares chiringuitos donde las inspecciones de la Consejería de Salud han detectado más problemas en la conservación y manipulación de alimentos. Asadores de pollos, hamburgueserías y pizzerías también son objetivo preferente de estas inspecciones, que cubren más de 25.000 locales en toda la comunidad.

El plan de inspecciones para comprobar las condiciones higiénico-sanitarias del sector de la restauración se intensifica en los meses de verano. 'Entre mayo y septiembre se realizan un 60% de las visitas programadas al año', explica el coordinador de la Consejería de Salud en esta materia, José Antonio Conejo. Más de un millar de personas trabajan en este dispositivo. 'Nos guiamos por los establecimientos censados, que son más de 33.000, pero el seguimiento es complejo porque hay mucha rotación de propietarios y empleados', explica el responsable de Salud.

El inventario de las inspecciones de 2001 -aún no hay datos disponibles sobre las visitas realizadas ya en este año- muestra que las condiciones de conservación y manipulación de alimentos, el origen de la inmensa mayoría de las intoxicaciones, son 'mucho mejores que hace cuatro o cinco años', asegura Conejo. Los mayores problemas se concentran en verano en los 'locales de temporada', sobre todo en los chiringuitos costeros, y están relacionados con 'una refrigeración inadecuada, la elaboración de comidas con varios días de antelación, la mezcla de productos frescos y elaborados, o el cruce de productos en las superficies de corte y manipulación.

Según los cálculos de Salud, entre el 10% y el 20% de los locales inspeccionados presentan alguna incidencia por una mala conservación de los alimentos. Además de los chiringuitos, las pizzerías, las hamburgueserías y los asadores de pollos, sobre todo los que en verano hacen frente a un aluvión de turistas, concentran las incidencias alimentarias.

Intoxicaciones

'Últimamente prestamos especial atención a los asadores de pollos, porque hemos comprobado que en algunos locales se reutilizan salsas y se elabora el producto con mucha antelación', señala Conejo. De hecho, los servicios de Salud dictaron la semana pasada el cierre cautelar de un local de este tipo en la localidad malagueña de Rincón de la Victoria, al sospechar que estaba en el origen de las gastroenteritis y diarreas que sufrieron 35 personas.

Tanto en este caso como en otra intoxicación que también afectó a 12 personas en un hotel de Marbella (Málaga) la semana pasada, los servicios de inspección creen que el origen puede estar en el consumo de salsas en las que se haya empleado huevo crudo. Ésta es una de las causas más habituales en las intoxicaciones alimentarias, por lo que Salud recomienda consumirlas de forma inmediata, sin conservar restos. Conejo aclara que las incidencias en los comedores de hoteles, de colegios o empresas y en restaurantes y bares son muy ocasionales.

Además de las posibles incidencias alimentarias, los servicios de inspección también controlan que se cumpla la normativa en otros aspectos, como la indumentaria de los trabajadores, las medidas de prevención contra insectos o el estado de mantenimiento de los aseos. Las multas por todas estas cuestiones pueden superar los 1,5 millones de euros.

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